El registro provincial de las personas de Mar del Plata legalizó el cambio de género de un nene de cinco años. Amparados en la Ley 26.743 de Identidad de Género, rectificaron la partida de nacimiento del pequeño y se dio inicio al trámite para tener su nuevo DNI.
Según informó La Capital de Mar del Plata, Tito nació con genitales femeninos pero cuando tenía dos años expresó que no se sentía identificado con la identidad de género que se le había adjudicado.
"Princesa no, caballero", fue una de las primeras aclaraciones que el pequeño le hizo a sus padres Guadalupe y Matías. Posteriormente, les pidió a su entorno que lo llamara "Tito".
Con el correr de los meses, Tito empezó a referirse así mismo en masculino, empezó a interpretar el rol de hombre en todos los juegos que compartían con su hermana y un día mientras hablaban de que serían "cuando sean grandes" y Tito dijo "cuando sea nene".
Día a día Tito manifestó su verdadera identidad de género y de a poco todo su entorno entendió que estaba frente a un niño.
El martes pasado, después de tres años, Tito llegó al edificio público junto a su familia, sus abuelos, sus tíos, un vecino, tres maestras, cuatro amigos de su colegio y los profesionales e integrantes de Asociación por un Mundo Igualitario, que acompañaron el proceso desde hace más de un año.
Gracias a la ley de Identidad de Género el trámite para rectificar la partida de nacimiento fue muy simple. Los padres debieron completar y firmar un formulario en el que solicitaban la modificación del género y el nombre que figuraban en la partida de nacimiento de su hijo menor.
Lo mismo hizo Claudia Vega, abogada integrante del Instituto del Niño y Adolescente del Colegio de Abogados local y Tito debió dar su conformidad. "Quiero que en mi DNI diga que me llamo S", expresó el pequeño.
Según los integrantes de AMI, Tito es el niño trans más chico de Mar del Plata en acceder sin juicio al Estado al cambio de género en su DNI.
Hasta el momento, la más pequeña había sido Luana, la nena trans oriunda de Merlo cuya historia fue plasmada por su propia madre en el libro "Yo nena, yo princesa".