Malaysia Airlines está “técnicamente en quiebra”, aseguró ayer su nuevo presidente alemán, y anunció la supresión de unos 6.000 empleos en la compañía lastrada por dos trágicos accidentes el año pasado.
“Técnicamente, estamos en quiebra y el deterioro de los resultados empezó mucho antes de los trágicos sucesos de 2014”, dijo Christoph Mueller a la prensa. Malaysia Airlines envió ayer una carta de despido a sus cerca de 20.000 empleados y a 14.000 les ofreció un nuevo contrato, con lo que suprimirá unos 6.000.
Mueller ya había utilizado este método expeditivo en la irlandesa Aer Lingus y la belga Sabena, lo que le valieron el apodo de “The Terminator” por sus recortes de empleo.
La compañía malasia espera que Mueller, de 52 años, la “reinvente” a partir del 1 de setiembre con una nueva imagen de marca.