La reanudación del torneo (para River e Independiente este 19 del corriente) y para la mayoría de los clubes el fin de semana del 25, generó que el fútbol argentino se divida desde que la AFA emitió un comunicado para que se postergara el comienzo. Muchos de los equipos de Primera División que cedieron jugadores a la Selección Sub 23 apoyan esta iniciativa y otros están del lado de la Superliga para que se respete el calendario programado, firmado, como también aprobado por las instituciones en 2019.
Aquí hay dos posturas que son válidas. Por un lado los que tienen desventaja deportiva porque se le van futbolistas al Preolímpico y no podrán contar con ellos en cuatro de las siete fechas que le quedan al campeonato. La otra es la de no modificar lo acordado. Dejar establecido lo que se diagramó con muchos meses de anticipación (abril del año pasado). Además entre estas dos maneras de ver la situación y de plantearla, hay una puja por la organización del torneo de Primera muy marcada. Casi todos los dirigentes que están del lado de la Superliga, no quieren “el doble comando” -tiene que ver con las funciones de cada uno-. Esto trae otras cosas por detrás de este conflicto y no veo que termine bien porque están buscando fortalecer a la AFA y debilitar a la Superliga.
Para mí la quienes manejar el certamen hizo lo que la AFA no logró en muchos años, darle un orden, seriedad y cambiarle la imagen a nuestro fútbol. Errores, como cualquiera tuvieron pero consiguieron que todos los que estamos en este ambiente sepamos cuándo y donde juega un conjunto. Día y hora que no se modificaban a cinco días del compromiso. Logró atraer a muchos sponsors y, en cuanto a la repartición del dinero por la televisación, intenta ser justo con todos. Este modelo es europeo y en el Viejo Continente da resultados y acá también fue posible con todo lo que esto significa.
Ahora bien ¿la reanudación debe ser como estaba planteada? No es lo mejor. Con sólo postergar una semana la reanudación de Primera se podría evitar todo lo que se generó en los últimos días. De esa forma los planteles que tienen jugadores en la selección nacional Sub 23 sólo los perderían por dos jornadas y no cuatro como se daría si todo comienza como esta armado.
¿Llegarán a un acuerdo sin secuelas? Totalmente opino que NO porque una de las dos partes quedará debilitada y eso seguramente será el puntapié para que se vengan otras situaciones que sigan generando problemas. La división de nuestro fútbol ya está planteada y depende de cada club donde se paró para lo que se dará en este 2020. Dudo que esto no traiga consecuencias mayores y seguramente siga siendo un factor más de diferencias ya que la AFA quiere volver a manejar el torneo de la primera división.
Seguramente tengamos más capítulos de esta historia y con el correr de los meses esto tenga un final porque no veo que ambas autoridades puedan seguir conviviendo con normalidad, Tapia por el lado de la AFA y Elizondo por la Superliga. Lo que pido desde esta columna es que se piense en el hincha que siempre va a la cancha y sólo quiere ORGANIZACIÓN para poder seguir alentando a su club. Basta de egos e intereses para que nuestro campeonato sea serio de una vez por todas.
Enfrentados. Tapia (AFA) y Elizondo (Superliga), en una relación dispar que no le hace bien al fútbol nacional.
Otro tema en tapete: el reparto del dinero de la TV. Un grupo de clubes busca separarse de los “grandes” para pelear por mayores ingresos.
