El Indec reveló ayer los datos de pobreza del primer semestre del año, los cuales arrojaron dos lecturas: el indicador (27,3%) bajó en comparación con un año atrás, pero por el impacto de la devaluación aumentó respecto del segundo semestre de 2017.
Asimismo, la población indigente creció 0,1%.
Ambos indicadores, estiman en el Gobierno nacional, empeorarán sobremanera este semestre por la profundización de la devaluación en agosto, la caída del salario real por la alta inflación y el incremento del desempleo.
El propio presidente Mauricio Macri lo dijo ayer: "Los indicadores de pobreza de las mediciones de marzo y setiembre (de 2019) también van a mostrar retrocesos, pero no vamos a dejar de hablar de la pobreza y menos dejar de trabajar de reducirla porque tengamos retrocesos" .
A nivel nacional, la cantidad de personas pobres saltó 1,6% en la primera mitad de 2018 respecto de los niveles registrados a fines de 2017. Es decir, 501.354 personas cayeron por debajo de la línea de la pobreza este año en los 31 aglomerados urbanos que releva el Indec.
En tanto, la indigencia se ubicó en 4,9%. Esto significa que 34.206 argentinos pasaron a no cubrir sus necesidades básicas alimentarias diarias.
Si bien la comparación de los indicadores debe hacerse entre semestres similares para evitar cualquier sesgo de estacionalidad, los datos dan cuenta que hubo un quiebre en la tendencia a la baja que venía mostrando tanto el índice de pobreza como el de indigencia.
Comparación anual
La cantidad de argentinos por debajo de la línea de pobreza bajó 1,3 puntos porcentuales anual en el primer semestre, al ubicarse en el 27,3% de la población, mientras que la indigencia descendió en la misma proporción al 4,9%.
Los datos oficiales indican que en el primer semestre de 2018 hubo 256.887 personas que superaron la línea de pobreza y otras 346.960 lograron salir de la indigencia, en comparación con el mismo período de 2017.
Los resultados provienen de la información de la Encuesta Permanente de Hogares y la valorización de la canasta básica alimentaria y de la canasta básica total, que reveló ayer el Indec.
El informe indica que la población total de los 31 aglomerados urbanos relevados es de 27.733.983 y está constituida en 9.086.099 hogares.
Durante el primer semestre de 2018, se encontraban por debajo de la línea de pobreza unos 1.777.249 hogares, en los que viven 7.581.118 personas.
En ese conjunto, 344.009 hogares se encuentran, a su vez, bajo la línea de indigencia, lo que afecta a 1.357.923 personas.
En el Gran Mendoza hay 260 mil pobres
El informe del Indec señala que en el Gran Mendoza, la pobreza fue del 27,9% en el primer semestre de 2018, por lo que afecta a 263.380 personas.
En la metrópolis provincial, el índice de pobreza se ubicó 3,6 puntos por debajo del nivel de hace un año. Pero, por la devaluación y la aceleración inflacionaria, fue 1,5 puntos mayor al segundo semestre de 2017.
A su vez, el 3,8% de los habitantes del Gran Mendoza (35.809 personas) estuvo por debajo de la línea de indigencia en el primer semestre de 2018. Ese indicador subió 0,7 punto respecto de hace un año y bajó 0,4 en la comparación con el segundo semestre de 2017.
Macri: “Se vienen meses difíciles”
El presidente Mauricio Macri aseguró ayer que la nueva suba de la pobreza “refleja las turbulencias de los últimos meses” y adelantó que los próximos meses “también van a mostrar retrocesos”.
"Tenemos meses difíciles por delante, pero nuestro objetivo sigue siendo el mismo que tuvimos desde el primer día. Nuestra meta es y va a seguir siendo siempre reducir la pobreza", remarcó.
Tras conocerse el dato oficial del Indec, Macri ofreció un discurso en el que planteó: "Es un número que esperábamos, que refleja las turbulencias de los últimos meses y las dificultades que estamos atravesando. No es una noticia fácil, claro que quisiéramos que fuera distinta", remarcó.
"Los indicadores de pobreza de las mediciones de marzo y setiembre también van a mostrar retrocesos.” Mauricio Macri
"Y los indicadores de pobreza de las mediciones de marzo y setiembre también van a mostrar retrocesos, pero no vamos a dejar de hablar de la pobreza y menos dejar de trabajar de reducirla porque tengamos retrocesos", vaticinó.
El Presidente remarcó que continuará hasta el final de su mandato con la misión de reducir la pobreza y prometió: “Vamos a dejar los cimientos listos para que, vengan quién venga, pueda continuar con este camino para cumplir definitivamente con este objetivo”.
Además, Macri ratificó que en diciembre se realizará otro pago extra para los beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo (AUH), que será de 1.500 pesos, y que se aplicará un aumento en los programas sociales.
“Recordemos que la mayor parte del Presupuesto que ahora estamos debatiendo en el Congreso para el próximo año está destinada a la inversión social, como nunca antes lo estuvo. Y eso tiene que ver con que la prioridad hoy es estar con los que más lo necesitan”, indicó.
Al término del discurso del Presidente, los ministros de Desarrollo Social, Carolina Stanley, y de Producción, Dante Sica, resaltaron la posibilidad de utilizar parte de la asistencia del FMI para cuestiones sociales.
"Tenemos un programa económico que estamos cumpliendo, estamos trabajando para poder superar esta crisis y estabilizar la economía para dar un marco más propicio para el crecimiento de la inversión", planteó Sica cuando sobre los reclamos impulsados por la CGT.
El ministro agregó que "este mes enviamos señales claras al mercado: el acuerdo técnico con el Fondo junto con el presupuesto sobre la base del equilibrio nos va a permitir más temprano que tarde poder estabilizar la macro y salir de esta crisis financiera que venimos sufriendo".