El total del endeudamiento de la Provincia llegó a los 26.318 millones de pesos el pasado 31 de diciembre de 2016. Así lo confirmará el informe de la dirección General de la Deuda Pública que se difundirá la próxima semana.
Los números que lo preceden muestran un incremento del 38% entre los más de 19.500 millones de pesos al término del gobierno de Francisco Pérez (14.500 consolidados y 5 mil flotantes) y los más de 26 mil al finalizar el primer año de Alfredo Cornejo.
"Es consecuencia del Banco de Mendoza Dos cuya inercia va a durar años", argumenta una vez más el ministro de Hacienda Martín Kerchner.
Se refiere a la deuda que en los noventa le dejó a la Provincia la caída de los bancos provinciales, y cuyos efectos compara con las consecuencias actuales de la explosión de la crisis fiscal mendocina en 2015.
El informe del organismo que dirige Víctor Fayad (h) muestra que entre julio y diciembre de 2016 la Provincia tomó en Anses dos préstamos por 1.179 y 300 millones de pesos a tasas del 15 y el 11,5 %, garantía de coparticipación federal y pagos semestrales hasta 2022 y mensuales hasta 2020.
Estos créditos forman parte de los reconocimientos que la Nación le viene haciendo a Mendoza desde el año pasado por sus contribuciones adicionales al sistema jubilatorio nacional.
El informe de Fayad hará notar que la deuda mendocina -que a junio de 2016 era casi en un 60% en dólares y en un 40% en pesos, al 31 de diciembre de 2016 se reparte un 53 en divisas y 47 en moneda nacional.
Los titulares de bonos mendocinos son los principales acreedores de Mendoza, mayoritariamente en dólares y suman 43% de las acreencias. Aquí están incluidos los proveedores del Estado a los que se les canceló sus deudas con bonos.
Los organismos multilaterales representan el 14% del total. Y los bancos internacionales el 2,5%. En ambos casos las deudas son en dólares.
En tanto la deuda de Mendoza en pesos con el gobierno nacional alcanza el 22% y con el Banco Nación el 19% del total.
Búsqueda de equilibrio
“Viene mejorando la relación en la canasta de monedas”, destaca Fayad. “Queremos conseguir un balance de 50 y 50”, confirma a su turno Kerchner. Y ambos destacan que la prioridad para los próximos endeudamientos pasa por que sean en pesos y en el mercado local (para evitar más deuda en dólares) o ante organismos multilaterales (en divisas pero con tasas bajas y plazos largos).
En 2016 el principal endeudamiento al que apeló la Provincia el año pasado tuvo lugar en mayo cuando colocó en los mercados internacionales el Bono Mendoza 2024 por 500 millones de dólares, sin garantía a una tasa del 8,38% y pagos semestrales.
En enero del año pasado la Provincia recibió de la Nación un anticipo de coparticipación por 980 millones de pesos a devolver en 45 meses a una tasa Badlar más dos y pagos cuatrimestrales.
Entre febrero y mayo colocó las dos series del Bono a los Proveedores por 1.000 y 600 millones de pesos a tasa Badlar y a 30 meses con pagos semestrales.
En junio de 2016 tomó un préstamo por 7 millones de dólares en el BICE para la compra de un helicóptero policial a tasa a Libor más 3,5% y 60 cuotas mensuales de pago.
Y en setiembre y octubre recibió los préstamos de Anses ya mencionados.