Tras el vergonzoso episodio que protagonizó en Twitter, el escritor Federico Andahazi habló sobre el tuit que ayer compartió con un enlace a un sitio porno y luego borró, algo que le valió de burlas y memes en las redes sociales. En la imagen se observaba a una chica trans exhibiendo sus genitales.
El intelectual explicó que sucedió y dijo que no fue el autor: "Se trata de un texto apócrifo". En otras palabras, Andahazi dio a entender que él no lo publicó ni lo quitó de la red social. Lo cierto es que, como es frecuente en estos casos, varios usuarios habían logrado capturar la imagen antes que el propio autor eliminara el tuit y el tema se convirtió en tendencia en Twitter.
Los memes en referencia a Andahazi estallaron, pero él siguió tuiteando sin referirse al episodio. Finalmente, hoy habló con Clarín. "Las redes son una cloaca infecta y están llenas de mensajes lanzados con la intención de dañar, aunque a mí esta situación me resulta absolutamente indiferente, no me preocupa en lo más mínimo", expresó.
"No puedo salir a desmentir cualquier cosa que se publique o entre en circulación", comentó Andahazi respecto a su tuit con pornografía.
Esta mañana, en radio Mitre, donde el escritor se desempeña como columnista, hizo un descargo, en el que recordó que a Gabriel García Márquez y a Jorge Luis Borges les pasó algo similar.
“En 1816, Lord Byron tuvo que aclarar que el cuento The Vampyre no era de su autoría, sino de la de su secretario, John Polidory. Pero aún hoy, 200 años después, hay quienes se obstinan en atribuirle ese cuento a Byron. Hace algunos años llegaron a decir que unos versos del locutor Silvio Soldán los había escrito Jorge Luis Borges. En el año 2001, en el amanecer las redes sociales, Gabriel García Márquez tuvo que desmentir que la autoría de un poema que estaba circulando por Internet fuera de él”, dijo Andahazi.
Y luego añadió: "La historia de los textos apócrifos es más antigua que la Biblia. Recientemente se me ha atribuido un texto acompañado de una ilustración pornográfica. Lamento decir que ninguna de ambas producciones me pertenecen. Tengo un gran respeto por los cuentos breves y, más aún por la buena pornografía, tal el caso del Marqués de Sade. Lamento defraudar a quienes me felicitaron por esos conceptos y esa imagen, pero, lo repito, no me pertenecen".