"Yo estoy seguro de mí mismo y no quiero caretearla más. Quiero que sepan que soy Juan y así me gustaría que me llamen", dice la actriz Maite Lanata, quien interpreta a un chico trans en la ficción de Telefé "100 días para enamorarse".
Es la primera vez que la televisión nacional aborda la realidad transgénero con tanta profundidad y permite visibilizar los obstáculos que debe atravesar una persona cuando su género asignado no coincide con el autopercibido. Las repercusiones en la sociedad no se hicieron esperar, sobre todo por la emotividad con que se plantean las distintas escenas, la brillante actuación de la joven y la seriedad con la que se trata el tema.
En Mendoza distintos referentes en diversidad sexual celebran la aparición de este personaje, ya que aseguran que permite que el público masivo conozca una realidad invisibilizada, así como todas sus aristas. Además resaltan la importancia del acompañamiento de la familia y de la escuela.
"La historia está excelentemente contada, entiendo que quien haya escrito el guión de esta novela tiene una mirada de la diversidad sexual como realmente es", aseguró Fernanda "Teté" Urquiza, coordinadora del Área Diversidad de la Provincia.
Para la funcionaria, esta mirada televisiva necesitaba el país. "Porque aborda, por un lado, el acompañamiento de la familia y, por el otro, el de la escuela, que es el primer agente socializador donde se pueda hablar, entender y brindar herramientas a las personas".
Es la primera vez que observa un abordaje de este tipo en la televisión. "Podemos haberlo visto anteriormente pero de forma sutil, por ahí veíamos un chico medio afeminado pero le daban el personaje principal para poder identificarlo y concientizar", precisó.
Según su visión, es posible mostrar esta realidad que muchas veces permaneció oculta, gracias a un cambio de paradigma que están promoviendo las generaciones más jóvenes. "Los que motorizan son les pibes y creo que es muy importante que un medio de comunicación masivo pueda reflejarlos como realmente son para poder hacer el acompañamiento correcto", remarcó.
Valentina Ochoa, una mujer trans de 34 años, coincidió al señalar la excelente calidad con la que está contada la historia de Juan. "Es la realidad que todes vivimos y que ahora se está viendo en la tele", manifestó la joven. Para ella suma mucho a visibilizar la situación del colectivo. "Está dando un mensaje a la sociedad, para decir acá estamos y existimos como personas", expuso.
En cuanto a las escenas más destacadas, recordó cuando el personaje va a la psicóloga con su mamá. "Está muy bueno el acompañamiento de los padres, pero muchas veces no pasa", se lamentó. Rememorando su historia, narró que cuando comenzó con su tratamiento de hormonización no le contaba a su madre por vergüenza y porque no lograba comunicarle lo que le pasaba. "Creo que antes no había tanta información ahora está más aceptado, aunque a la sociedad todavía le cuesta", reconoció.
Contención familiar
El sexólogo, Germán Gregorio Morassutti, parte de consultorio de hormonización del Hospital Central desde hace 4 años, empezó a escuchar de la novela por sus pacientes, por lo que decidió ver algunos fragmentos en internet, para interiorizarse más. "Hasta donde he visto, me parece muy interesante la visibilización de estas situaciones, sobre todo en los varones trans porque muchas veces pasan desapercibidos, ya que es más fácil imitar un rol masculino", detalló el experto.
Observó también como muy positiva la forma en la que se trabaja la contención familiar, un aspecto fundamental para las personas trans. "Que la familia apoye hace que varíe su expectativa de vida de 35 años a los 90", subrayó. Detalló que si se da esta situación la persona trans logra completar sus estudios, cuida mejor su salud y está contenida. "Cuando no hay apoyo familiar, son expulsados del hogar a edades muy tempranas, la única alternativa laboral que le queda es la prostitución, lo que las lleva al consumo, a la colocación de silicona líquida, entre otras conductas riesgosas", enumeró el sexólogo. Por eso a la hora de trabajar en salud de la población trans, el primer pilar es la familia.
Asimismo destacó el rol social de los medios para concientizar en este sentido. "La verdad que es una forma de trabajar en conjunto, el alcance que tiene los medios es mucho mayor el trabajo que podemos nosotros desde las redes de salud", señaló Gregorio Morassutti.
Recordó además el personaje que interpretó Flor de la V, en la novela Los Roldán en 2004. "Si bien causó impacto e instaló temática, no dejó de ser con la imagen del travesti y no cómo vive la vida cualquier mujer", diferenció. A la vez que reconoció que hace 14 años atrás, el personaje de Maite no hubiese sido posible. "No podría haber hablado de la forma que se habla actualmente. Estamos en un permanente cambio social que nos permitiendo ir avanzando en estos aspectos", aseguró.
Descubrimiento temprano
Para entender la realidad transgénero el sexólogo Germán Gregorio Morassutti, explicó que cuando nacemos nos asignan un género que se corresponde con nuestros órganos sexuales. "Cuando empezamos a adquirir el lenguaje, nos damos cuenta si este género asignado, coincide con el que percibimos", precisó a la vez que detalló que si hay coincidencia las personas son consideradas cis -abreviatura de cisgénero- y si no, son consideradas trans. "Es una diferenciación que hacemos para salir del concepto de que existen personas normales y otras trans", subrayó el experto.
En el caso de las personas trans, se trata de un sentimiento que los acompaña desde que nacen. "No es algo que se decida, sino un sentimiento que no se puede ocultar. Se visibiliza a los 2 ó 3 años porque el niño tiene lenguaje y los papás empiezan a percibirlo", precisó.
A partir de ese momento, tal como indicó el profesional, comienza un proceso de transformación y aceptaciones de la propia persona y de la familia hasta que se pueda visibilizar y sacar hacia afuera lo que siente. "La ley de identidad de género abre puertas enormes en este sentido, además del avance de la Organización Mundial de la Salud que ya no considera la transexualidad como una enfermedad", aseguró.
El reflejo en la pantalla
No solamente en la televisión de nuestro país se comienza a visibilizar la realidad transgénero, sino que también está presente en una pantalla observada desde todo el mundo como es la de Estados Unidos. De hecho, la serie Pose, estrenada en junio de este año, cuenta con el elenco transgénero más grande de la historia para una serie con guión. Además ya en 2014, la ficción distribuida por internet Transparent relató la historia de un padre de familia que decide contarles a su esposa y a sus hijos que se identifica a sí misma como una mujer.
Se trata además de una temática no tan novedosa para el mundo del cine. Ya se ha visto en la película europea "La chica danesa", en Chile con "Una mujer fantástica" y en Mendoza con "La Pasión de Verónica Videla" que cuenta la historia de una chica trans que quiere estudiar psicología y se encuentra con grandes impedimentos para llevar a cabo su sueño.
“La visibilidad de los transgénero está siendo muy mediática”
Valentino Barboza (20) es el rey de la Vendimia para Todos y quien marcó la historia del festejo al ser el primer chico trans coronado. Oriundo de Santa Cruz, decidió presentarse al certamen para visibilizar la realidad de los hombres trans. "Porque parecía que cuando se hablaba de transexualidad sólo se refería a las mujeres", comentó.
Hoy el joven siente haber cumplido su cometido y celebra que el tema esté presente en la televisión. "La visibilidad de los chicos trans está siendo muy mediática y eso me pone contento", aseguró desde Capital Federal donde se trasladó para estudiar Derecho. Para él la interpretación del personaje de "Juan" en la novela "100 días..." es muy buena y cumple su cometido a nivel social. "La transexualidad no solía tratarse en medios tan masivos".
Para él, es fundamental que la novela muestre situaciones adversas como cuando el abuelo del personaje, interpretado por Osvaldo Laport, se enoja con la realidad de su nieto. "Muestra lo que pasa en verdad, porque no todo es color de rosa, no todos los padres lo aceptan, ni todos los compañeros de la escuela", señaló Valentino.
En su caso particular, más allá de su ámbito familiar, nunca se sintió fuerte como para enfrentarse a la sociedad, hasta que decidió presentarse para Vendimia para Todos. "Siempre fui una persona muy tímida, jamás había hablado en una nota, pero lo hice porque me pareció importante que estemos representados". Y destacó el rol de las mujeres trans, quienes fueron grandes impulsoras de los derechos. Según su experiencia, el primer obstáculos de las personas trans es aceptarse a sí mismas. "Y si no nos aceptamos no podemos pretender que no quieran los demás, por lo que es fundamental trabajar en eso", destacó.
