La comuna de San Martín quedó a cargo de un pastor evangélico

Durante toda esta semana y hasta el viernes, la comuna de San Martín ha quedado en manos del pastor evangelista y ex rey de la bailanta en el Este, Horacio Rodríguez (58), que como actual concejal y vicepresidente primero del HCD, ocupa el tercer puesto en la línea de mando.

Así y teniendo en cuenta que por estas horas coinciden en sus vacaciones de verano el intendente Jorge Giménez y el presidente del HCD, Bartolomé Robles, es Rodríguez, quién llegó al Concejo por el Movimiento de Acción Social Federal (MasFe) durante las elecciones legislativas de 2017, quien gobierna el departamento del este provincial. Los candidatos de MasFe iban en la boleta del Partido Intransigente, que encabezaba José Luis Ramón como aspirante a diputado nacional.

"Estoy ocupando un doble cargo, como concejal sigo atendiendo a la gente que a diario viene con sus problemas y también reemplazo unos días al intendente, será hasta el viernes que vuelve de sus vacaciones", comentó Rodríguez, casado, papá de una docena de hijos y pastor evangelista desde hace casi veinte años.

En el Concejo Deliberante de San Martín, las opiniones sobre Rodríguez están divididas: algunos lo ven como un tipo frontal sin doble discurso, que "parece estar durmiendo la siesta" aunque es "rápido y muy vivo"; otros lo ubican dentro del oficialismo: "Llegó como opositor, pero hasta acá, votó siempre con el PJ que lo premió con la vicepresidencia primera" acusan.

Sobre el tema, Rodríguez aclara: "Yo no voto proyectos según el partido, sino pensando en la gente. Así he apoyado propuestas del oficialismo y también de la oposición". Después agradece "el respaldo de la comuna. Cuando hemos ido por algún pedido concreto de vecinos por agua, luz o el arreglo de alguna calle, siempre ha respondido".

Candidato teocrático

En las elecciones de este año, Horacio Rodríguez peleará por la intendencia como candidato de MasFe, "el partido político de la teocracia en la democracia", como gusta decir el senador provincial Héctor Bonarrico, líder de la agrupación y a quien Rodríguez define como "mi padre espiritual".

Y aunque sabe que aspirar a la  intendencia será una empresa difícil, confía en el apoyo de su iglesia y de los fieles; de hecho, así fue como llegó al Concejo, sumando el 17,7% de los votos, la mayoría de ellos militados en los templos evangelistas del departamento.

"Tampoco descartamos alguna alianza que nos dé más chances, pero aunque ganar la intendencia es difícil, conseguir colocar a un nuevo concejal de nuestro partido es mucho más posible y detrás de ese objetivo también vamos", agregó Rodríguez y completó: "Al comienzo, muchos pastores ponían su reparo a nuestro proyecto y decían que la política y la religión no debían mezclarse, pero creo que han entendido que desde una banca se pueden conseguirse cosas para la gente y en eso hemos estado todo este tiempo".

Dice que si fuese electo intendente no llegaría al municipio para cambiar sino para aportar: "Hay cosas que se han hecho bien en San Martín, pero tenemos que apuntar a generar fuentes de trabajo que es el gran problema; por eso mi apuesta es por las cooperativas de trabajo, tanto en las ciudades como en el campo, donde se pueden organizar chacras". Rodríguez estará a cargo del Ejecutivo de San Martín hasta el viernes.

En estos días ha firmado expedientes y se ha reunido con gente que tenía agenda con el intendente: "Leo, firmo, consulto y cuando tengo alguna duda le pregunto al secretario de Gobierno. Calculo que Giménez puede estar tranquilo y disfrutando de sus vacaciones".

Técnico electrónico, disc jockey y bailantero

Horacio Rodríguez es técnico electrónico y en su vida ha tenido muchos oficios, desde escenógrafo e iluminador, a sonidista, panadero y disc jockey; también fue empresario de la bailanta en Rivadavia, donde supo ser muy conocido dentro de ese ambiente.

En 1994, buscando a un hijo al que no veía desde hacía un mes, llegó a un templo evangelista: "Lo había buscado en hospitales y comisarías, pero nadie sabía nada. Esa noche y después de que rezaron por mi hijo, él me llamó desde Córdoba. Así entré en la iglesia". Rodríguez nació en Córdoba y llegó a Mendoza en 1985, como parte de un circo que recorría el país. Cuando la compañía pasó por el este, decidió que se quedaría a vivir en la región.

Quince años después y a seis de haber dejado atrás su vida como empresario de la bailanta, se convirtió en pastor y a su primer templo lo abrió en Los Campamentos, al sur de Rivadavia. Está casado, tiene 12 hijos y reparte su tiempo entre la comuna y un templo en San Roque donde es pastor y al que asiste un centenar de fieles.