La historia parece de principios del 1900, aquella época en la que se fueron formando en la Argentina los clubes deportivos por decisión de un minúsculo grupo de amigos que después fueron sumando voluntades. Pero no, es actual, de nuestros tiempos, de pleno siglo 21. A Ignacio Gómez, Esteban Rodríguez y Nicolás Salcedo el destino le tenía preparado atravesar montón de sensaciones juntos. Tras compartir el mismo barrio y jugar al fútbol en las inferiores de Luján Sport Club, en febrero de 2017 decidieron crear un club propio y así nació La Colonia, una institución que dos años después ya tiene su propio predio.
"Comenzamos alquilando canchas de césped sintético en un negocio particular. Canchas que se alquilaban para que los grupos de amigos pudieran jugar. Nosotros nos reservamos una franja horaria. Pintamos el lugar y le dimos la estética del club", cuentan en la charla. "El primer año funcionamos como escuelita, con la cual participábamos de torneos organizados por privados. La verdad que nos sorprendió la buena concurrencia que tuvimos porque rápidamente superamos los cien jugadores. Eran chicos de hasta 13 años y sólo masculino", agregan.
Y llega la explosión. "En el 2018 elaboramos el proyecto para ingresar a Fefusa, aunque todavía no teníamos cancha propia. Agregamos las categorías que la Federación nos pedía, desde Microbios hasta Primera masculina y femenina. En ese momento seguíamos entrenando en sintético, lo que significaba dar ventajas a la hora de jugar en pista. Así todo, llegamos a la final en el primer torneo frente Godoy Cruz C, la que perdimos en Talleres. Pero en el Clausura volvimos a jugar la definición y se la ganamos a Sanidad, por lo cual el 2019 pudimos estar en la Primera C", repasa Nacho con la emoción que cualquier padre tiene cuando ve que su "hijo" crecer a pasos agigantados.
Los muchachos siempre jugaron de local en Alem, en Godoy Cruz, y gracias al apoyo de Federico Patiño. "Tenemos que agradecer su buena predisposición, ya que en Luján no conseguíamos dónde jugar. Algunos clubes nos alquilaban la cancha, pero los costos eran elevadísimos", rememoran.
El sueño de la casa propia. "Este año nos asociaciamos al Club Vistalba que por ahora tiene hockey y tenis. Ellos nos invitaron y nos cedieron un terreno que tienen. Así que firmamos un convenio que fuera beneficioso para los dos y trasladamos toda la estructura que teníamos en la calle Moreno. Y bueno, esta semana pudimos terminar el playón de 38 por 38 dónde vamos a hacer dos canchas de entrenamientos y una para jugar", relata y hasta se le pianta un lagrimón. Y cómo no va a ser así, si el club que nació en alguna charla de ese trío, hoy tiene más de 200 jugadores, un plantel de diez profesores, con entrenadores específicos de arqueros, con planificaciones mensuales y anuales que se cumplen a rajatabla, con el objetivo de "mejorar en cada categoría, lo que pide la edad de cada chico y siempre respetando los procesos y la misión que nos pusimos cuando arrancamos: formar jugadores".
Claro que no por ello se olvidan de lo competitivo y hoy, entre otras cosas, disfrutan del gran momento que están teniendo las chicas en la Primera B Femenina, dónde ya están en los cuartos de final. El próximo paso será pintar las canchas y así poder brindar con fuerzas en año nuevo, dónde podrán decir, con razón, que jugarán de local. La Colonia, un fiel reflejo de que los sueños son posibles y que están para cumplirse por más locos que parezcan.
La mudanza al club vistalba
Los padres de la "criatura" se mostraron muy agradecidos con el Club Vistalba, ya que dicha institución les cedió un terreno para que pudieran seguir con el proyecto futsal. Al no conseguir recursos y muchos menos lugar en el corazón de Luján, se marcharon a Vistalba, donde próximamente construirán dos canchas para entrenamientos.