Finalmente, nueve días después, el reclamo que se generalizó en la multitudinaria concentración del martes de la semana pasada (“ponéle fecha, la puta que lo parió”), tuvo su acogida ayer de parte de la CGT: el primer paro contra la política económica y social del gobierno de Mauricio Macri será el jueves 6 de abril, por 24 horas, tendrá alcance nacional, pero no habrá movilización ni acto.
La marcha y el acto final característicos de los paros del sindicalismo peronista, sin embargo, no estarán ausentes en la protesta, porque seguramente será esa la modalidad que adoptarán las dos CTA, las organizaciones sociales y la izquierda, que si bien no fueron invitadas por la conducción cegetista se descuenta que adherirán. Las CTA ya habían decidido un paro para el jueves 30 y seguramente adherirán al de la CGT.
La oficialización del 6 para convocar al paro fue anunciada en conferencia de prensa por los triunviros-secretarios generales Carlos Acuña, Juan Carlos Schmid y Héctor Daer, después de una expedita reunión de una hora del consejo directivo de la CGT en su sede histórica de la calle Azopardo.
Ninguno de los tres dio las razones por las cuales no habrá movilización ni acto el día del paro, aunque se dio a entender que luego de los sucesos finales del martes 7 no quieren volver a exponerse ante una multitud.
Acuña, en cambio, atinó a una respuesta original cuando se le recordó que anteayer el jefe de Gabinete, Marcos Peña, dijo que el paro no soluciona nada: “Ellos son el Gobierno. Lo que haremos los trabajadores será una protesta quedándonos en la casa y no trabajando”. A lo que Schmid agregó que con el paro la CGT se hace eco del “malestar generalizado en amplias capas de la población”, pero “no nos corresponde a nosotros elaborar una propuesta sino al Congreso y al Ejecutivo, que son los que fueron votados por la ciudadanía”.
También contundente resultó la respuesta de Daer a la observación de que el mismo Peña y el Gobierno todo sostienen que detrás del paro está la instigación del kirchnerismo y hasta de la propia ex presidenta, Cristina Fernández. “Ninguno de los tres somos kirchneristas”, dijo. “La decisión la tomó por unanimidad el Consejo Directivo”, remarcó.
Dejaron en claro, además, que no hay decisión política alguna del Gobierno nacional durante las próximas tres semanas que pueda revertir la convocatoria. “El paro no se levanta y todo nuestro esfuerzo estará puesto en lograr que tenga un alcance del cien por ciento”, dijo Daer.
En función de ello, convocarán a todos los sectores y miembros del consejo directivo visitarán las regionales de la CGT en el país.
Acuña enumeró algunos de los reclamos de la convocatoria (no a los despidos y suspensiones, fin de las importaciones de productos terminados, paritarias sin tope) y, al igual que Daer, dijo que el Consejo Directivo de la CGT le dio un “apoyo solidario a los docentes, que pelean por la dignidad de sus salario y por la paritaria nacional”.
La efectividad del paro dependerá de si los principales sindicatos del transporte (colectiveros de UTA, maquinistas de trenes de La Fraternidad y pilotos aéreos de Apla) mantienen su decisión de sumarse, como lo anticiparon. Gremios de los “gordos” y los “independientes”, como los mercantiles, construcción, estatales de UPCN, acataron la decisión de ir al paro.
La unanimidad para convocar al paro no terminó sin embargo de curar las heridas abiertas tras los incidentes con los que finalizó el acto del martes 7 y la solicitada que se publicó el domingo pasado en la que sólo se hizo referencia a “grupos violentos” que protagonizaron los mismos.
Una prueba en ese sentido fue la ausencia en la reunión de ayer de Pablo Moyano, secretario adjunto de camioneros y gremial de la CGT, aunque sí estuvo su hermano Facundo. Pablo aspira a una conducción unipersonal que remplace al triunvirato.
Las CTA adherirán pero sin levantar su protesta
Gioja se apuró a ratificar el apoyo del PJ
El presidente del PJ nacional, el diputado sanjuanino José Luis Gioja, ratificó su respaldo al paro convocado por la CGT para el próximo 6 de abril al afirmar que “acompaña y acompañará los reclamos y las reivindicaciones que hagan los trabajadores organizados”.
“En esta oportunidad, puntualmente, creo que la medida de fuerza se justifica en los aumentos de los niveles de desocupación y en la cantidad de suspensiones que se están registrando en algunas industrias, también en el aumento de algunas importaciones de productos de consumo que perjudica notoriamente a nuestras industrias”, respondió.
Asimismo, Gioja expresó que la medida de fuerza “fundamentalmente se justifica en el rumbo de la política económica y social que está llevando adelante el gobierno”.
En este contexto, el legislador sostuvo que significan “un brutal ajuste imposible de soportar”.