Después de más de dos años, hoy se hizo público que un miembro de Al Qaeda, sindicado como el presunto cerebro de los atentados de 2001, escribió una carta al entonces presidente de Estados Unidos, Barack Obama, desde su celda en Guantánamo y responsabilizó a Washington por los ataques.
La carta fue fechada en la cárcel de Guantánamo en enero de 2015, recién llegó a la Casa Blanca a principio de este año y sólo se hizo conocida hoy, luego que el diario The Miami Herald publicara algunos extractos y otros medios se hicieran eco del resto del texto, al que también accedió una agencia de noticias internacional.
"No fui yo quien empezó la guerra contra ustedes el 11/9. Fueron ustedes y sus dictadores en nuestras tierras"
"No fui yo quien empezó la guerra contra ustedes el 11/9. Fueron ustedes y sus dictadores en nuestras tierras", escribió, en inglés, Khalid Mohammed, un kuwaití de 51 años, considerado por las autoridades de Estados Unidos como el posible cerebro del peor atentado que sufrió el país en su propio territorio y que dejó cerca de 3.000 muertos en Nueva York, el Pentágono y Pensilvania.
La carta tiene 18 páginas, la acompaña un manuscrito de otras 50 páginas y está dirigida a "la cabeza de la serpiente" y el presidente "del país de la opresión y la tiranía".
"Seré feliz de pasar el resto de mi vida en mi celda solo, alabando a Alá y arrepintiéndome ante él de mis pecados y mis errores (...) Y si su corte me condena a muerte, seré aún más feliz porque me encontraré con Alá y con los profetas y veré a mis mejores amigos, que fueron asesinados injustamente alrededor de todo el mundo y veré al jeque Osama bin Laden", escribió el prisionero desde Guantánamo.
"Si su corte me condena a muerte, seré más feliz porque me encontraré con Alá"
Según su abogado defensor, David Nevin, Mohammed comenzó a escribir la carta a mediados de 2014, en plena ofensiva israelí contra la Franja de Gaza, un masivo ataque que duró siete semanas y dejó más de 2.200 palestinos muertos, la mayoría civiles, según la ONU.
"Fue su principal motivación para escribir la carta", contó el abogado al diario miamense, sobre la ofensiva de Israel, un férreo aliado de Washington en Medio Oriente. En la misiva, Mohammed también menciona otras ofensivas, dirigidas por Estados Unidos: la guerra en Irak, operativos militares contra Irán, los reconocidos crímenes de guerra en Vietnam en los años 60 y 70, y el ataque nuclear contra la ciudad japonesa de Hiroshima.
El prisionero de Guantánamo inclusive se permitió criticar directamente a Obama, a quien describió como "un abogado inteligente, que conoce bien los derechos humanos" y que "puede matar a su enemigo sin un juicio y tirar su cadáver al mar, en vez de entregárselo a su familia o respetarlo lo suficiente como ser humano para enterrarlo", en referencia al asesinato de Bin Laden en 2011 a manos de un grupo militar de élite en Pakistán.
Mohammed pertenece al selecto grupo de cinco prisioneros de Guantánamo que fue acusado de un crimen en concreto y que está siendo juzgado por una corte militar ad hoc en esa misma base de la Marina en territorio cubano.
El kuwaití estuvo detenido durante tres años y medio en una prisión secreta de la CIA y allí fue sometido al submarino, una de las técnicas de tortura más usada por la inteligencia estadounidense, 183 veces, según The Miami Herald.
Por eso, jura, nunca pedirá "misericordia" a una corte norteamericana. Pero Mohammed no siempre odió a Estados Unidos. En los años 80s, cuando la Casa Blanca tenía una buena relación con los combatientes islamistas que peleaban contra los soviéticos en Afganistán -y que luego fundaron a Al Qaeda-, él estudió ingeniería en Carolina del Norte.
De ahí su buen nivel de inglés. Cuando terminó de escribir las casi 70 páginas de su carta y manuscrito había comenzado el año 2015. Pidió que los guardias enviaran ambos textos a Washington, pero todos se negaron.
Su abogado tuvo que pelear en la Justicia durante dos años para que finalmente un tribunal accediera y obligara a los guardias militares de Guantánamo a enviar la carta, que finalmente llegó a la Casa Blanca poco antes de que Obama entregara el poder a Donald Trump. No sé sabe si Obama alguna vez abrió el sobre y leyó los dos textos del presunto cerebro de los atentados del 2001.