El análisis de una de las cajas negras del avión de EgyptAir que se estrelló en el Mediterráneo en mayo confirmó la detección de humo, anunció hoy la comisión investigadora egipcia.
"Los datos registrados (por la caja negra) coinciden con los mensajes del ACARS (comunicación automática de alertas) sobre detección de humo en baños y en instrumentos de vuelo", precisó la comisión en un comunicado y agregó que "partes de la sección delantera del avión tenían indicios dedaños por alta temperatura y de hollín".
Un Airbus A320 de EgyptAir que iba de París hacia El Cairo se estrelló en el mar entre Creta y la costa egipcia el 19 de mayo, muriendo sus 66 ocupantes.
La hipótesis del atentado, inicialmente manejada por Egipto, cedió terreno a la del incidente técnico.
El aparato emitió dos alertas automáticas dos minutos antes de la caída, señalando que había humo en la cabina de los pilotos y un fallo en el ordenador que gestiona los comandos.
Las dos cajas negras, la que guarda los parámetros técnicos del vuelo (Flight Data Recorder, FDR) y la que graba las conversaciones en la cabina de pilotaje (Cockpit Voice Recorder, CVR) fueron rescatadas del Mediterráneo, pero las tarjetas de memoria estaban ilegibles, por los que fueron enviadas a Francia a los laboratorios de la Oficina de Investigación de accidentes aéreos (BEA, por sus siglas en francés).
La comisión egipcia anunció el lunes que la caja con los parámetros de vuelo había sido "reparada exitosamente" por los técnicos franceses.
La caja con la grabación de las conversaciones de los pilotos todavía está siendo reparada.