La BBC denunció ante la ONU a Irán por "privación a los derechos humanos"

La radiodifusora británica se quejó de que la República Islámica congeló los activos de más de 150 personas asociadas con su servicio persa.

La BBC denunció ante la ONU a Irán por "privación a los derechos humanos"
La BBC denunció ante la ONU a Irán por "privación a los derechos humanos"

La BBC presentó una denuncia hoy ante las Naciones Unidas acerca de que Irán congeló los activos de más de 150 personas que están asociadas con su servicio persa, y calificó las acciones de la República Islámica como "una privación a los derechos humanos".

La radiodifusora británica describió las acciones de Irán como parte de una "investigación criminal" sobre su personal, antiguos empleados y contribuyentes por acusaciones de que fomentaban una "conspiración contra de la seguridad nacional" en Irán y el extranjero.

Entre las personas que fueron objeto de la investigación se incluyen iraníes con doble nacionalidad: de Australia, Canadá, Francia, Alemania, Gran Bretaña y Estados Unidos.

La misión de Irán en la ONU no respondió a las peticiones de comentarios. Los medios de comunicación iraníes no informaron de forma inmediata sobre la querella.

La BBC informó del congelamiento de los activos por primera vez en agosto. Dijo que la orden provenía de un tribunal de la conocida prisión Evin en Teherán, en la cual se encuentran detenidas personas con doble nacionalidad y prisioneros políticos, entre otros.

La orden judicial impide a los imputados vender, comprar o heredar propiedades y bienes en el país hasta el 20 de diciembre, cuando el resultado de la investigación criminal se dará a conocer, de acuerdo con la denuncia.

"El personal de la BBC Persa no puede regresar a Irán debido al riesgo que corre de ser arrestado, interrogado o encarcelado", se lee en la denuncia.

También se señala que muchos miembros del personal de la BBC Persa han sido separados de sus familias por años y, en algunos casos, no tuvieron la oportunidad de ver a sus seres queridos antes de que murieran.

La denuncia de la BBC se envió a David Kaye, un investigador independiente de la ONU sobre la libertad de expresión.

Kaye indicó a los medios de comunicación en la sede de la ONU en Nueva York, que había recibido la denuncia de la radiodifusora.

"Hemos expuesto nuestras preocupaciones con el gobierno (de Irán) en los últimos días", dijo Kaye.

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