En San Luis, la expectativa por ver a River desbordaba el estadio Juan Gilberto Funes. Y el equipo de Marcelo Gallardo no defraudó. Porque River salió a la cancha convencido de su juego, ese que había deslumbrado en el primer tiempo ante Rosario Central. Y por momentos lo consiguió, a pesar de los cambios que implementó el entrenador. Ingresó Leo Ponzio para adueñarse del medio, Tomás Martínez como enlace y Lucas Boyé para ser la segunda guitarra de Teo Gutiérrez. Enfrente, Colón; el objetivo, un lugar en los cuartos de final de la Copa Argentina.
A partir de ese momento, River se acomodó en el partido y dominó con claridad a Colón. Aunque la única jugada clara de gol la generó a los 23’, tras una gran pared entre Boyé y Teo que dejó mano a mano al juvenil con el arquero Jorge Broun. Boyé lo quiso gambetear, pero Broun le dejó el pie y le corrió la pelota. Boyé se la llevó por delante y la chance se desvaneció.
Sobre el final de la primera mitad, un pelotazo para Alario terminó en gol. El delantero saltó con Funes Mori, que en su afán por rechazar hizo un blooper y dejó mano a mano al delantero con un taco. Alario remató, Chiarini dio rebote y Alario metió la pelota en el arco. Pero el árbitro Luis Alvarez decidió no convalidarlo. ¿Por qué? Por una supuesta falta de Alario en el salto con el defensor. Una decisión que dejó muchas dudas.
El segundo tiempo fue similar al primero. River protagonista y con dominio casi absoluto de la pelota. Colón, agazapado, y con las jugadas más claras. Empezaron a pasar los minutos y los entrenadores movieron el banco. Gallardo mandó a la cancha a Leonardo Pisculichi y a Gio Simeone. Osella, a Cristian Pavón. Y los dos delanteros ingresados tuvieron situaciones inmejorables. En la última, Teo se metió en el área por derecha, pero le dio fuerte y sin puntería, a las manos de Broun. Nada pudo evitar los penales.
Pisculichi, al ángulo; Alario, gol, cruzado; Ferreyra, gol; Callejo, cruzado y tapa Chiarini; Funes Mori, bombazo; Pavón, fuerte al medio, tapó Chiarini; Teo, cruzado, tapó Broun; Garnier, fuerte al medio; Urribarri selló la clasificación de River. En cuartos de final jugará con el ganador de Central-Tigre.