El informe de la Auditoría General de la Nación (AGN) planteó un panorama complicado en los municipios, con cuentas en rojo que heredaron las actuales gestiones y que llevarán al menos unos meses en sanearse. Junto con la Provincia, Guaymallén, Las Heras, Malargüe y General Alvear, comunas que pasaron de manos justicialistas a radicales, también pidieron que la lupa del órgano de control externo, dependiente del Congreso Nacional, analice los números municipales.
Los resultados, a escala, repitieron la lógica que se presentó a nivel provincial: deudas que comprometen las gestiones e irregularidades en la designación de personal. En este sentido, los intendentes que llevan recién un poco más de un mes en su gestión, reconocieron que deberán transitar estos meses entre la herencia, que denunciaban en campaña, y las construcciones propias.
Hace una semana se conoció públicamente el resultado preliminar de la AGN. El informe abarcó a 4 de las 6 las comunas antes justicialistas (excepto Tupungato y Luján), aunque los intendentes, en diálogo con Los Andes, refrescaron los números y actualizaron los déficits recibidos.
Dificultades para pagar sueldos
En el Gran Mendoza, hay intendencias que anticipan dificultades para pagar salarios: Guaymallén y Las Heras.
El más comprometido es Marcelino Iglesias (UCR) en Guaymallén, que todavía no logra pagar los haberes de diciembre a todos los municipales. En el departamento más poblado, la AGN señaló que la deuda es de $182 millones, aunque el intendente le agregó algunas “facturas a cobrar que aparecieron después” y corrigió la cifra del pasivo: $205 millones. “Lo que hace la auditoría es confirmar con una visión externa lo que nosotros señalábamos antes de asumir”, señaló el radical.
El informe de la AGN muestra que desde el 30 de junio, unos días después de que perdió el ex intendente, Luis Lobos (PJ), al 10 de diciembre, cuando asumió Iglesias, la deuda flotante creció en $44 millones, elevándose a los 182 mil auditados.
En cuanto a la composición de la planta de trabajadores, Iglesias discriminó y dijo que mientras cuenta con 1.300 empleados dedicados a los servicios, tiene una sobredimensión en las tareas administrativas: 2.700 entre personal temporario y permanente.
Esto es lo que llamó él una pirámide invertida. “Estoy depurando todos los recursos humanos, al 31 de enero el municipio va a contar con 200 personas menos”, adelantó el jefe comunal.
En Las Heras, el radical Daniel Orozco señaló que “la comuna que encontramos no es la que (el ex intendente, Rubén) Miranda -PJ- nos decía”. “El 2015 cerró con un déficit de $110 millones. La deuda flotante de aproximadamente 180 millones en este momento, ya que si bien el informe nos da 140, nosotros descubrimos algunas cositas más”.
En cuanto al informe, la deuda flotante creció entre el 30 de junio y el 10 de diciembre (último semestre) y llegó a los 51 millones, es decir, se incrementó en el 57% más.
El problema que se desató hace unos días en Las Heras, cuando se conoció que 662 trabajadores contratados habían visto finalizadas sus funciones el 31 de diciembre, está explicado en las planillas: en menos de un año, la planta de personal permanente y transitorio creció en casi 500 personas, todos contratados. “La planta se aumentó, principalmente en tiempo de campaña”, agregó Orozco.
El Sur, también con deuda
De los 3 departamentos sureños, 2 cambiaron al radicalismo en las últimas elecciones y pidieron que la AGN haga lo suyo.
En Alvear, la deuda flotante tuvo un incremento del 466% desde el 30 de junio al 10 de diciembre: pasó de 6 a 28 millones. Es decir, según la AGN, el justicialista Juan Carlos De Paolo se endeudó en los últimos 6 meses en casi 22 millones, monto que tendrá que afrontar el radical Walter Marcolini.
“La situación es muy complicada, la deuda es exigible en corto plazo lo cual nos dificulta el normal desenvolvimiento de todo el accionar de la comuna”, señaló Marcolini y dijo que a los 7 días de haber asumido, la Superintendencia de Riesgos de Trabajo les dio de baja con la ART y les trabó el CUIT, “por una deuda de 3 millones que no pagó el gobierno anterior”.
Por este motivo, el intendente sureño dijo que desarrolló un autoseguro, mientras negocia la deuda. Otra de las herencias, fueron las retenciones a los trabajadores por bono de sueldo, que no se depositaron a los acreedores. A esto, le suma la necesidad de arreglar la deuda con los proveedores, como también sucede en el orden provincial.
Por otro lado, si bien al momento de asumir, los municipales tenían acreditada la nómina de noviembre, no así los funcionarios de la anterior gestión, quienes deberán seguir esperando. “Los funcionarios, antes de irse, usaron el último envío de coparticipación para cobrar un retroactivo al mes de marzo, en lugar de pagar ART. Ahora yo voy a poner primero las urgencias”, advirtió el intendente Marcolini.
En Malargüe, la situación es similar. El actual intendente Jorge Vergara Martínez (UCR), según la AGN, recibió del justicialista Juan Agulles una deuda flotante que creció en los últimos 6 meses en 9 millones: pasó de un poco más de 25 a 35 millones; mientras que la planta de personal permanente y transitoria se incrementó, en el último año, en 190 empleados.
“Recibimos una Municipalidad en un descontrol administrativo y financiero”, calificó Jorge Tieppo, secretario de Hacienda del departamento. Si bien la AGN señala que la deuda flotante llega al 10 de diciembre a los 35 millones, el funcionario explicó que sumando otros procesos que no estaban contabilizados, el 2015 cerró con un déficit de 40 millones.
“Nosotros no hemos pagado a ningún proveedor y hemos privilegiado el pago de sueldos que fue con los fondos que tenía la Municipalidad a cobrar y con las regalías al mes de diciembre”, señaló Tieppo y agregó que se encontraron con una gran morosidad de los malargüinos, por lo que implementarán un plan de pago para que los contribuyentes se pongan al día.
Las Heras, la más litigiosa
Una carpeta aparte en todo municipio son los juicios que debe afrontar la comuna, ya sea como parte actora o demandada. La AGN midió este aspecto y en las conclusiones, Las Heras es el departamento que por lejos tiene más juicios y montos a cobrar o pagar.
En total, el departamento de más extensión geográfica tiene más de 66 mil juicios pendientes como denunciante, cantidad que representa $53 millones. En cambio, la comuna ha sido denunciada 122 veces, lo que significa $13 millones que debería pagar si sale la sentencia. Por otro lado, hay una buena para Orozco: de los casi 9.500 juicios con sentencia, en los que la Municipalidad es parte actora, sólo se han cobrado 247 casos, por lo que aún se podría percibir $5.854.664.
En este rubro sigue Guaymallén, el más poblado, con 70 casos en contra y con sentencia definitiva, que significan más de $8 millones. En proceso hay 316 y no se consigna monto. En cambio, la Municipalidad tiene 13 juicios a favor y con sentencia, que representan más de $67.000. A su vez, hay 106.285 causas iniciadas por la comuna por apremios fiscales, que se traducen en más de $78 millones.
En tercer lugar está Alvear. Como denunciante, el municipio tiene 45 causas en proceso, que representan $93 mil. En cambio, y como saldo negativo, el departamento ha sido denunciado 36 veces, lo que representa más de $4 millones.
Por último, Malargüe tiene 5 causas pendientes a su favor, que representan $334 mil, mientras que está demandada 36 veces, por un total de más de 3 millones. El saldo también es en rojo, ya que debería pagar más de lo que tendría que cobrar.