El Gobierno nacional anunció ayer la puesta en marcha de la unificación del control del traslado de productos de origen vegetal para combatir la evasión impositiva y garantizar la calidad sanitaria de los mismos. En su primera etapa el mecanismo se aplicará a los productos frutihortícolas "pesados", como la papa, la cebolla, la batata, la pera y la manzana, entre otros.
La firma de la resolución correspondiente que se publicará hoy en el Boletín Oficial se anunció durante una conferencia de prensa de la que participaron los funcionarios intervinientes: el ministro de Agroindustria, Luis Etchevehere; el titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Leandro Cuccioli, y el director del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), Ricardo Negri.
La resolución establece el control impositivo y sanitario de esos productos a través del Documento de Tránsito Vegetal electrónico (DTV), que unificará los actuales Documento de Tránsito Vegetal del Senasa, que funciona desde 2016, y el Remito RG 1415 de la Afip. Así, un solo documento, generado en un único trámite autogestionado, permitirá cumplir con el control fiscal de lo que se traslada con fines comerciales y con el resguardo del estatus fitosanitario de la producción vegetal.
El sistema no autorizará el traslado de los productos vegetales que no cumplan con los requerimientos, tanto fitosanitarios como tributarios. Con esta herramienta se agilizará el trámite que debe realizar el productor, transportista y/o comercializador, se avanza en la transparencia de la actividad y se preserva la inocuidad de los alimentos.
En ese sentido, el titular del Senasa dijo: “Los únicos evasores que perseguimos desde el Senasa son los que no cuidan la comida de los argentinos. Es clave comprender que detrás de un ticket hay una cadena en blanco y un alimento más confiable. Por eso el control fiscal y la sanidad van de la mano”.
La medida alcanza al tránsito de todo producto, subproducto y derivado de origen vegetal, nacional e importado, desde el lugar de origen hasta su arribo a los mercados mayoristas. Su aplicación será gradual en el caso de las hortalizas (irá desde las "pesadas" a "las de hoja") y este mismo año está previsto extender ese control de trazabilidad a los sectores avícola y harinero; y en 2019, al azucarero, yerbatero, lácteo y pesquero.
El mecanismo extendido ayer al sector de productos de origen vegetal es parte del programa de las autoridades sanitarias alimenticias del país para alcanzar en 2020 la vigencia de normas de buena práctica de productividad frutihortícola.
El titular de la Afip, por su parte, dijo no estar en condiciones de precisar el resultado recaudatorio de esta medida, pero dijo que tendrá un “impacto significativo”. Además, ratificó que el remito electrónico entrará en vigencia en el sector comercializador de las carnes, pese a que hay un alto nivel de carnicerías que trabajan en negro.
Contribuyentes
Según mapa del sector frutihortícola en el mercado interno a partir del cual se hizo el diagnóstico para decir la implementación DTV, hay 46.360 contribuyentes en la etapa primaria.
En la etapa intermedia y de procesamientos (cámaras, empaques, acondicionamiento, industria) hay 7.419 empresas que deben tributar.
Son 8.577 los contribuyentes que operan en mercados concentradores, distribuidores mayoristas y supermercados y 112.850 los del mercado minoristas.