La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) anunciará mañana que la recaudación tributaria del 2018 ascendió a tres billones, 350.000 millones de pesos, con un crecimiento interanual del 32 % según las primeras estimaciones oficiales.
Este resultado será producto de haber cerrado diciembre con ingresos por $310.000, con un aumento respecto a igual mes del año pasado también del 32%, por debajo de inflación que se estima en 43% interanual.
Estos resultados, tanto mensual como anual, reflejaron en gran medida el menor nivel de actividad económico, en especial en lo relacionado con el mercado interno, que solo en el tercer trimestre del año presentaba una caída interanual del 3,5%, según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
Esto se observa en que la recaudación de aportes al sistema de seguridad social solo aumentaron 25% en términos interanuales, por un menor nivel de empleados registrados, unos 120.000 menos entre noviembre de este año e igual mes del 2017, y el retraso en la actualización de los salarios.
A eso se le debe agregar que la recaudación de impuestos internos aumentaron, todos juntos y en promedio un 27%, pero los provenientes del comercio exterior vienen incrementándose al 50% interanual.
Una gran modificación fue que a partir de septiembre, y luego de la devaluación que llevó al dólar a cotizar en torno de los $40, el Gobierno retomó el cobro de retenciones a las exportaciones, en especial al trigo, el maíz, el girasol, y a los combustibles, con los cuales las cuentas del Estado Nacional recuperaron dinamismo.
Además, el titular de la AFIP, Leandro Cuccioli, destacó que "la mayor formalidad de la economía, a través del pago con tarjetas de débito u otros medios electrónicos, ayudaron a incrementar la recaudación".
"Se siguen instalando unos 65.000 POS por mes y en los próximos días estaremos anunciando nuevas medidas para ampliar el uso de las nuevas tecnologías por parte de los consumidores, así como nuevas reglamentaciones para que los comercios estén obligados a aceptar un mínimo de tarjetas de pago y compra", dijo Cuccioli a comienzos de diciembre, en declaraciones a la prensa.
Desde el organismo destacaron que "los comercios no quieren perder de vender, y antes un restaurante, que por ahí no te daba ticket y solo recibía efectivo, ahora tiene que tener el pos y aceptar que le paguen $1.000 con tarjeta de débito, porque nadie va a ir con tantos billetes en la mano".
Otro factor que ayudó a apuntalar la recaudación durante todo el año fueron los planes de pago que la AFIP puso a disposición de los contribuyentes y que permitieron que varios de ellos se mantengan dentro del sistema y que, en cuotas, paguen lo que adeudan tanto a nivel de impuestos como de contribuciones a la seguridad social.
Por eso, el organismo dispuso prorrogar hasta el 31 de enero el plan de facilidades de pago llamado "puente fiscal" que cerraba el 31 de diciembre, pero que originalmente finalizaba el 31 de octubre.
El plan permite pagar las deudas hasta en 48 cuotas y a una tasa del 36%, muy por debajo del 60% que hoy cobran los bancos.