En medio del grave escenario recesivo, la actividad económica registró en septiembre un desplome del 5,8%, arrastrada por las drásticas caídas en el sector del comercio y en la industria manufacturera.
“En septiembre de 2018, el estimador mensual de actividad económica (EMAE) cayó 5,8% respecto al mismo mes de 2017. El indicador desestacionalizado bajó 1,9% frente a agosto de 2018”, detalló el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec).
Se trata de la segunda mayor contracción del año: el peor guarismo fue el de junio, cuando la actividad se hundió 6,8% y evidenció así las primeras consecuencias de la grave crisis cambiaria que se desató en mayo.
Los sectores más afectados en septiembre fueron los del comercio mayorista, minorista y reparaciones (-12,8%), la industria manufacturera (-10,8%), impuestos netos de subsidios (-10,1%), transporte y comunicaciones (-4,6%) y hoteles y restaurantes (-4,2%), entre otros.
A contramano, reflejaron buenos desempeños la pesca (2,8%), la intermediación financiera (2,7%) y la agricultura, ganadería, caza y silvicultura (2,2%), entre otros.
Con el rojo de septiembre, la actividad económica acumula su sexto mes consecutivo en baja. En abril retrocedió 0,5%; en mayo, 5,2%; en junio, 6,8%; en julio, 2,7%; y en agosto, 1,9%.