El ministro de Economía, Axel Kicillof, relativizó ayer la evaluación que el Directorio del FMI debe realizar sobre la actualización en las metodologías para medir la inflación y el PBI en la Argentina. Adelantó que la definición podría prolongarse más allá de los plazos establecidos.
“EL FMI va a expedirse en algún momento y no sabemos cuándo. Probablemente se extienda ese plazo”, dijo el ministro en declaraciones radiales desde Washington.
Kicillof despegó su participación de la asamblea de Primavera del FMI de la pendiente revisión de las estadísticas nacionales que está en manos del Board del organismo.“No tiene que ver con lo que está pasando y no se va a definir ahora”, enfatizó.
Si bien es cierto que durante las asambleas se tratan temas de carácter global, no es menos relevante que la realización de este encuentro coincidió con el plazo máximo que la directora gerente del FMI, Christine Lagarde, tenía para elevar a la cúpula del organismo su última evaluación sobre los ajustes realizados por la Argentina.
No obstante, el ministro insistió en que medir la inflación y la pobreza “no es sencillo” y remarcó que el Banco Mundial “tiene dos mil indicadores para hacerlo”.
Kicillof buscó minimizar el impacto de una eventual evaluación negativa y advirtió que “en muchos casos lo que pasa es que vuelven a hacer sugerencias” sobre cómo realizar ciertas mediciones. De esta forma el funcionario buscó cubrirse de algún posible nuevo cuestionamiento.
En los últimos meses las divergencias entre las mediciones oficiales y las privadas volvieron a ensancharse y tomaron las mismas diferencias que motivaron los cuestionamientos del FMI.
En otro orden, el ministro destacó el valor de los créditos que logró destrabar con el Banco Mundial y reconoció que el litigio con los holdouts había trabado la aprobación de algunas líneas.
En ese sentido, destacó que “Argentina nunca cayó en default con los organismos multilaterales de crédito, ni siquiera en 2001 y por eso una de nuestras quejas es que Banco Mundial tiene que reconocer esta situación y darnos el financiamiento”.
Se aceleró la inflación oficial de marzo
La inflación de marzo fue de 1,3 % y en un año ascendió a 16,5 %, según informó ayer el Indec. El índice mostró una suba frente al 0,9% de febrero. Con el resultado de marzo informado por el Indec, el primer trimestre cerró con una variación de precios de 3,4 %. El alza de 1,3 % resulta la más alta desde julio del año pasado, cuando había sido de 1,4%.
De esta forma, la medición oficial de marzo resultó 0,8 punto porcentual menor que la calculada por privados, que se ubicó en 2,12 % para marzo y 29,81 % en doce meses.
En febrero, la inflación privada había arrojado 1,48% y en enero, 2,08%. Quiere decir que en marzo se registró la variación más alta en lo que va del año. En marzo, para el Indec el aumento en los alimentos fue de 1,1 %, el más alto del trimestre. Las subas más importantes se detectaron en verduras, productos lácteos y carnes. El rubro con mayor incremento fue educación (4,8 %).