Justicia

La república exige que los tres poderes del estado funcionen. De lo contrario solo tendremos una máscarada que impide ver la realidad.

Hoy el poder judicial de Mendoza no está funcionando, y esto no es una apreciación dicha con ligereza. La tecnología de la que habla la Corte Suprema de Mendoza es inexistente en la gran mayoría de los fueros, y solo aplicable en algunos supuestos a los tribunales penales y de familia.

Un país sin justicia no tiene horizonte ni esperanza, y cuando está en manos de burócratas que generan cambios despojados de la realidad, lo que se ha logrado es el mayor desproposito de los últimos años.

Al margen del prestigio juridico de cada uno de los miembros de la Corte pueda tener, que personalmente desconozco, los cambios introducidos por un grupo de burócratas y técnicos que desconocen absolutamente el ejercicio profesional han generado un estado que ha paralizado al poder judicial.

Tenemos médicos, enfermeros, personal administrativo, fuerzas policiales y del ejercito, personal de farmacias, supermercados etc.etc.etc dando la cara en la satisfacción de necesidades de la gente, y un poder judicial con los salarios más altos de la provincia de feria por temor al contagio.

La República exige un cambio con orden, cuidado personal, turnos por matrícula de abogados, y turnos para los empleados que no puede esperar más tiempo, so pena de denegación de justicia de los ciudadanos.

Las convicciones de quienes han encontrado en la tarea del poder judicial una vocación y un servicio deben ser puestas de manifiesto en horas tan lamentables para la población.

Justicia importa dar a cada uno lo suyo, y cuando eso no ocurre como hoy, el Poder Judicial  es solo una máscara frívola que esconde la dura realidad de reclamantes sin esperanza ni solución.

Carlos María Serrano

DNI 6.900.620.