La Cámara del Crimen resolvió que el juez de instrucción Omar Peralta y el fiscal Martín Mainardi investigarán una denuncia contra directivos de Racing, Quilmes y la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) por presuntamente haber "arreglado" el resultado del partido que ambos equipos de fútbol disputaron en mayo 2013 para contribuir a que Independiente descendiera a la Primera B Nacional.
El 31 de mayo, Quilmes, rival directo de Independiente en la lucha por evitar el descenso en la temporada 2012-2013, le ganó como local por 1-0 a Racing e impidió que el más tradicional adversario de Racing saliera de la zona de descenso, al menos tras esa fecha 16 del torneo Final.
El partido promovió múltiples especulaciones e, incluso, debates entre los hinchas del equipo vencido sobre lo que debían hacer sus jugadores en la cancha, atendiendo a que una victoria favorecería a su clásico rival.
La Sala Cuarta del Tribunal resolvió una "cuestión de competencia" y diez meses después de la denuncia, formulada por el presidente del Colegio de Abogados de la Capital Federal y socio de Independiente, Jorge Rizzo, el 5 de junio de 2013, determinó quién deberá llevar adelante el expediente.
Rizzo, junto con el también socio Gastón Bevilacqua, pidieron que sean citados a prestar declaración indagatoria, como acusados, el presidente de la AFA, Julio Grondona; el entonces titular de Racing, Gastón Cogorno, y su par de Quilmes, el senador Aníbal Fernández, y el ex entrenador del club de Avellaneda Luis Zubeldía.
Los denunciantes aludieron a las declaraciones del presidente de Independiente, Javier Cantero, quien expresó que "Racing jugó para atrás, jugaron para perder", "eso no es folclore del fútbol, eso es cobrar para perder".
La causa estuvo empantanada porque el fiscal Mainardi entendió que se trataba de un delito contemplado en la denominada "Ley De la Rúa" sobre espectáculos deportivos.
La "Ley De La Rúa" fija penas de prisión de un mes a tres años para quien "por sí o por tercero, ofreciere o entregare una dádiva, o efectuare promesa remuneratoria, a fin de facilitar o asegurar el resultado irregular de una competencia deportiva o el desempeño anormal de un participante en la misma.
La misma pena se aplicara al que aceptare una dádiva o promesa remuneratoria".
Por el monto de la pena, consideró que debía intervenir un juez Correccional, pero la jueza Ana Díaz Cano interpretó que podría tratarse de un caso de "defraudación", que tiene una escala penal mayor y por lo tanto corresponde a otro fuero.
"Hasta tanto se determine con precisión los hechos que conformarían la base fáctica de estas actuaciones, la declinatoria de competencia deviene prematura. Hasta el momento sólo se cuenta con el aporte de los denunciantes, quienes se ocuparon de aclarar que únicamente oyeron a otra persona comentar acerca de la existencia de un arreglo vinculado con un partido de fútbol, pero ellos en concreto carecían de otro tipo de información", dijo la Cámara.
"Hasta el presente nada aún se ha investigado", reconocieron los jueces Carlos Alberto González y Alberto Seijas.