El jury de enjuiciamiento que debía resolver la situación de los miembros de la 8va Cámara del Crimen no se reunió porque el ministro de la Corte, José Valerio, se excusó de participar.
Sin embargo en el Gobierno de Alfredo Cornejo sospechan de una maniobra del PJ y de otros integrantes de la Corte, para "salvar" a los jueces denunciados por víctimas de la Tupac Amaru.
Según trascendió, Valerio decidió dar un paso al costado porque consideró inadecuado participar en esta instancia previa a un juicio político, cuando por otro lado, como integrante de la Sala Penal de la Corte, debe resolver un recurso de queja contra esa misma Cámara del Crimen, presentado por la fiscal Gabriela Chaves, que investiga a la Tupac en un centenar de causas.
Chaves -con aval del Ministerio Público Fiscal- presentó el recurso luego de que en setiembre pasado, la 8va Cámara cuestionara con dureza su investigación y rechazara su acusación por asociación ilícita contra la líder de la Tupac, Nelly Rojas y otros integrantes de esa organización kirchnerista.
Ese recurso aún no ha sido resuelto por la Sala Penal, que incluso ya mostró la salida de Mario Adaro, quien se excusó porque en el pasado (con militancia en el PJ) conoció a Rojas.
Poco se sabe de la discusión de ayer puertas adentro del Jury. Sí está claro que la mayoría aceptó la decisión de Valerio. También se supo que luego hubo un fuerte debate, porque mientras algunos pedían seguir con el proceso de votar si se aceptaba o no investigar a los camaristas, otros querían postergarlo.
El resultado fue la postergación para el próximo 1 de marzo, bajo el concepto de que la salida de Valerio dejó incompleto al Jury.
Pero en el medio quedaron interrogantes. Uno de los más fuertes es por qué los otros dos integrantes de la Sala Penal y miembros de este Jury, Omar Palermo y Julio Gómez, no siguieron igual camino que Valerio. Ellos también deben resolver en el recurso de Chaves.
Aquí aparecen las sospechas del Gobierno. "Si la mayoría del Jury aceptó los argumentos de Valerio, los mismos deberían ser tenidos en cuenta para los otros dos miembros de la Sala Penal", cuestionó el subsecretario de Justicia, Marcelo D'Agostino. "O si integran el Jury, no deberían estar en la Sala Penal en esta causa puntual", siguió.
Otras voces cercanas a Cornejo fueron más duras aún y plantearon una especie de pacto entre el PJ y el tándem Palermo-Gómez. "Quieren salvar a los jueces", dicen esas voces, lisa y llanamente.
En la vereda opuesta no sólo niegan tal maniobra, sino que acusan al oficialismo de ser el generador de un artilugio para evitar la discusión.
“La única intención del radicalismo era dilatar la reunión, porque sabían que no les daban los votos”, señaló un referente del PJ.
“La maniobra fue de ellos porque querían evitar que Palermo y Gómez votaran”, agregó el vocero peronista.