Si Lionel Messi es hoy el mejor del mundo, difícilmente encuentre el ambiente vernáculo botín tan fino como el que calza Juan Román Riquelme. Ayer, además de unidos por el fútbol como todos los años festejaron casa uno por su lado sus cumpleaños, otro 24 de junio, una fecha reservada para los célebres.
Messi, de cuna rosarina, cumplió sus 26 primeros años en Barcelona mientras disfruta de vacaciones y desfila trajes. Lo hizo en un crucero junto a sus hermanos.
Riquelme, nacido en San Fernando, cumplió 35 en su Don Torcuato, tal vez brindando por una futura temporada mejor con Boca para luego definir si da las hurras en el fútbol rentado. Seguro que los 24 de junio son día de grandes. Porque hace 102 años nacía en Balcarce un tal Juan Manuel Fangio, que deslumbraría en las pistas en los 50, llevándose cinco títulos mundiales en la incipiente Fórmula Uno, un récord que duraría casi medio siglo.
También hace 102 años nacía Ernesto Sábado en Rojas, quien de joven quiso ser físico y fue uno de los mejores escritores de la Argentina pero también de habla hispana. Ganó el premio mayor para un hispano parlante, el Cervantes en 1984. Autor de El Túnel, Sobre Héroes y Tumbas, Abadón, el exterminador. Murió entre los suyos en su querido Santos Lugares cuando faltaban días para cumplir 100 años.
Pero esa fecha también trae tristes recuerdos. En 1935 Carlos Gardel moría junto a sus músicos en el avión que intentó pero no pudo despegar en Medellín. El Zorzal criollo nacido en Francia dejaba para siempre su canto con 44 años.
Mucho más joven y por cierto que no tan famoso como Gardel, el cordobés Rodrigo Bueno lucía entre los famosos del comienzo del siglo XXI cuando en la madrugada del 24 de junio de 2000 encontró la muerte en una autopista cuando cruzaba por Berazategui.
