El que escribe este texto es Martín Chamorro, que también se juega a protagonizar. El que escribe tiene sus ojos más puestos en el cine que en el teatro y ese es el problema de "Josefina". Porque si bien ambas expresiones se nutren una de otra (más el cine del teatro que al revés) no son, en sus lenguajes, ni lo mismo; aún cuando realizadores como
Roman Polanski jueguen a “teatralizar” su película, como en “Carnage”, que tuvo antes la puesta en una sala de Yasmina Reza.
Con "Josefina", la historia de un chico gay, que termina entrampado en un rapto enfermizo, se monta sobre el espacio escénico como una trama que parece más cruce de gustos cinematográficos que dramaturgia donde el espacio y el tiempo teatral son sus generadores.
Es una curiosa mezcla entre "Misery" (1990, Rob Reiner) y "Psicosis" (1960, Alfred Htichcock) pero con poco de teatral y, con una pretensiosa intención de abordar varios aspectos de la violencia de género hacia los homosexuales, que termina dejando un mensaje peligroso por lo ambivalente.
La dirección de la puesta es de Pinty Saba, que hace una prolija interpretación del texto dramático para ponerlo en escena con los aires del thriller.
Se luce Gustavo Casanova en su personaje. Agustín Daguerre y Martín Chamorro quedan, frente a esa interpretación, muy rezagados; al tiempo que a Jorge Fornés este registro no es el que más le favorece. Aún así la poética calza bien en quienes buscan mainstream teatral sin otras pretensiones.
Ficha
"Josefina"
Dirección: Pinty Saba. Con: Martín Chamorro, Agustín Daguerre, Jorge Fornés y Gustavo Casanova.
Día, hora y lugar: Hoy a las 22, en Las Sillas (O. Andrade 510).
Calificación: Buena.