José Carrieri, un adiós eterno e invisible

A los 93 años falleció "Pepe" Carrieri, uno de los grandes artistas de las vanguardias en Cuyo. Su inmensurable producción deja, para Mendoza y San Juan, una herencia plástica que testimonia los cambios y constantes culturales desde mediados del siglo pasado hasta hoy.

La metáfora del vuelo

Nacido en 1921 en Mendoza, Carrieri emprende su formación en artes visuales en un momento en que la provincia vive una de las transformaciones culturales más fuertes de su historia, el ingreso de las vanguardias modernas. En la década del 40, estudia el profesorado de Bellas Artes en la Universidad Nacional de Cuyo. Como artista se especializa en escultura junto a Lorenzo Domínguez y en grabado con Víctor Delhez.

Entre 1947 y 1956 se desempeña como profesor de modelado y ceramista en la Escuela de Cerámica de la UNCuyo, dirigida por el arquitecto César Jannello. Esta experiencia académica revoluciona los parámetros establecidos entre las formas bellas y las útiles germinando la idea que luego dará lugar a la creación de la primera escuela de diseño de Argentina. La escuela funcionará doble turno: para enseñanza y para prácticas de taller.

En 1953, para la Facultad de Agronomía, realiza en gres esmaltado, una aceitera con forma de oliva, asas con impronta de hoja y doble pico que se considera parte de los comienzos del diseño industrial mendocino. Un año antes viaja becado a París para estudiar con el escultor Constantin Brancusi, pero debido a problemas de salud del maestro debe concluir.
 
Continúa su formación como asistente del escultor Antoine Pevsner, a quien ayuda con la terminación de sus obras. En este viaje recorre España, Italia, Bélgica, Holanda e Inglaterra. Se reúne con Pablo Picasso, Henry Moore, Jean Arp, Georges Van Tongerloo, Zadkine y Lucio Fontana, por nombrar algunos de los artistas que forman el nuevo panorama europeo.

A su regreso por Mendoza participa en 1954 del suceso de la Feria de América desarrollado en el Parque San Martín, un hito pionero e internacional en materia de arquitectura, diseño y arte moderno. Para esta ocasión se utiliza el Frank Romero Day como sede de la Fiesta de la Vendimia, corolario de la Feria. La escenografía del espectáculo contó con un fondo realizado por Carrieri con lineamientos neoplásticos, compuesto por prismas triangulares retroiluminados que giran mutando la visual.

Tensiones

Hacia 1955 el panorama político y social se recrudece. El golpe militar de la revolución libertadora afirma las diferencias intelectuales y restablece el clima conservador y tradicional de Mendoza. La Facultad de Artes no es ajena a esta situación, allí la discusión se manifiesta hasta los niveles de figuración contra abstracción. Carrieri, ajeno a esta pelea, decide desplazarse de Mendoza a San Juan y continuar su enseñanza plástica dentro de la Facultad de Arquitectura de la UNCuyo.

Lo acompaña su mujer Leonor Rigau, una importante figura en los estudios del color y de las formas de expresión en las artes visuales, con quien forman su familia y hogar. Una vez situados en el páramo sanjuanino, comienzan una revolución constante y silenciosa dentro del campo cultural. Entre 1956 y 1971 organiza el Taller de Plástica para arquitectos y, en este recinto, forma varias generaciones de profesionales.
 
Su aporte radica en la sensibilización morfológica, su capacidad estructural y la incorporación de conceptos funcionalistas. El resultado de estos ensayos es la "Colección de Morfología Generativa" formada por más de 125 modelos inéditos, materializados en diversos materiales como cemento pigmentado o poliéster. Estos trabajos académicos durante varios años han estado en peligro hasta que, por gestión de Rigau, son recuperados y actualmente forman parte del patrimonio visible de la Facultad de Arquitectura.

En 1974 funda el Instituto de Expresión Visual dentro de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional de San Juan, proyecto que continua hasta 1994. El Instituto, dedicado a la investigación artística y cultural, es equipado con un laboratorio fotográfico, talleres de video y electrónica, sala de diseño y de proyección, aportes gestionados por Carrieri y Rigau.

En 1976 es nombrado Decano de la Facultad de Filosofía, Humanidades y Artes en la Universidad Nacional de San Juan, cargo que concluye en 1978 por la presión política.
Una creación a destacar es la Casa Carrieri proyectada en 1962, donde despliega sus conocimientos arquitectónicos. La construcción sanjuanina cuenta con techos abovedados realizados en ladrillo visto y hormigón armado. Constituye una tipología característica de la arquitectura moderna antisísmica de la región cuyana.

Otra de las herencias singulares en la provincia vecina es el "Rosetón de los Deportes", instalado en 1970 en el Parque de Mayo con motivo del Campeonato Mundial de Hockey. Esta gran escultura de 8 metros de diámetro y 70 toneladas de hormigón armado está diseñada a partir de los cinco aros olímpicos rotados en el espacio y modelados en forma transversal. Esta obra ha sido varias veces reconocida por la Academia Nacional de Bellas Artes y medios especializados.

Mendoza y la memoria

La muerte de Carrieri el 22 de marzo testimonia el paso fugaz de nuestras vidas, pero también pone nuevamente de manifiesto la necesidad inmediata de políticas culturales de protección patrimonial. La gran tarea de conservación e interpretación del legado de grandes hacedores es aún tarea pendiente para el diseño y la arquitectura. El fin generacional de estos pioneros no puede ser obviado, implica una urgencia pública que ayude a conservar los legados de personalidades como Luis Quesada, Filomena Moyano, Colette Boccara, entre otros grandes autores.