José Cano renunció hace un mes como jefe del Plan Belgrano, gestión por la cual fue criticado y perdió el rédito político que esperaba ganar. Y hace dos semanas, como precandidato a diputado nacional, fue derrotado por 21 puntos porcentuales por el PJ en las elecciones de Tucumán.
Igualmente, se mantiene como uno de los dirigentes de la primera línea del radicalismo nacional. Y se envalentona: sostiene que en su provincia va a achicar esa ventaja en los comicios del domingo 22 de octubre y hasta se anima a decir que, cuando asuma como diputado, le gustaría reemplazar a su correligionario cordobés Mario Negri como jefe del bloque de la UCR.
En una entrevista que le concedió a Los Andes, el exfuncionario del presidente Mauricio Macri afirmó que Cristina Kirchner "no tendrá margen" para complicar la marcha del Gobierno y que, si intentara desestabilizarlo, su figura "merecería aún más repudio" en la opinión pública.
-¿Usted puede revertir el resultado de Tucumán en octubre? Su lista perdió contra la del gobernador Juan Manzur por 21 puntos...
-Las PASO y las de octubre son dos elecciones distintas. Fui candidato en 2013, en las PASO sacamos el 25% y en las generales pasamos al 35%. Este proceso será similar. Creemos que de las cuatro bancas de diputado nacional ganaremos dos y que habrá una clara polarización en la elección con lo que representa el kirchnerismo en Tucumán y nosotros como espacio nacional. Hemos cometido tal vez algunos errores en transmitir nuestro mensaje. Estamos rectificándolo. Estamos rearmando el equipo de campaña. Hemos tenido reuniones esta semana con los partidos que forman parte de Cambiemos en Tucumán, con Rogelio Frigerio, Marcos Peña y Santiago Nieto, del equipo de (Jaime) Durán Barba. No tenemos dudas de que esta elección será distinta.
-¿Qué le sugirieron Peña y Durán Barba?
-Hemos provincializado mucho la elección. Ese ha sido un error y ahora vamos a trabajar con los lineamientos nacionales. Macri va el viernes 1 de setiembre a inaugurar la pista y las obras del aeropuerto (Benjamín Matienzo). Y hasta el día de la elección irán a Tucumán Frigerio y Elisa Carrió, y estamos hablando con María Eugenia Vidal. De todas maneras, aunque queremos mejorar el resultado, si uno lo compara con el de las PASO de 2015 pasamos del 21% al 31%. Hemos crecido en una provincia que está hegemonizada por el peronismo desde hace 30 años.
-¿Usted querrá ser jefe del bloque de la UCR?
-Yo formo parte de un partido nacional que integra Cambiemos. La impronta que el presidente Macri le dio a este espacio es el trabajo colectivo, en equipo, y obviamente que me gustaría estar en un lugar para dar lo que tengo para ofrecer desde mi experiencia parlamentaria: presidente del bloque de senadores con cuatro años en el Senado, dos años en la Cámara de Diputados, vicepresidente del partido con Gerardo Morales. Pero ocuparé el rol y el lugar que Cambiemos considere que es el adecuado. Después de la elección, esto será motivo de diálogo con las otras fuerzas políticas que integran Cambiemos. Pero sí me gustaría.
-¿Piensa que la presencia de Cristina Kirchner en el Congreso le puede complicar las cosas al Gobierno?
-Más allá de que sea electa senadora, ya tiene un sinnúmero de situaciones sobre las cuales debe rendir cuentas ante la Justicia como consecuencia de su paso por el Gobierno. Tiene la posibilidad siendo senadora, aún desde una posición crítica, de contribuir a la gobernabilidad y mejorar la calidad de vida de la gente. No me imagino que tenga mucho margen para obstaculizar o poner palos en las ruedas, sólo oponiéndose al Gobierno o pretendiendo que le vaya mal. Merecería aún más repudio de la gente si llegando al Senado pretende desestabilizar al Gobierno.
-¿Piensa que Cristina cumplió un ciclo, como dicen Manzur y otros gobernadores del PJ?
-En política uno tiene que defender sus convicciones. No entiendo que personas como Manzur, que fue ministro de Cristina, kirchnerista de paladar negro, hoy por una cuestión de oportunismo político desconozca lo que avalaba hasta hace muy poco tiempo. Esa falta de lealtad no habla mal de Cristina sino de él y otros que formaron parte de su espacio. En política nadie se retira.
-¿El radicalismo necesita una mayor cuota de participación en el poder, con respecto al Pro y la Coalición Cívica?
-El radicalismo es un partido horizontal, con mucha vida interna. Los presidentes de los interbloques de Diputados y el Senado son de la UCR, hay tres ministros de la UCR y el partido tiene el convencimiento de que hay que consolidar Cambiemos como coalición. Ese compromiso asumimos con los argentinos en 2015, cuando llevamos de candidato a presidente a Mauricio Macri.
-Pero muchos se quejan por el escaso protagonismo.
-El radicalismo hoy tiene espacios de participación y no veo que el Presidente a la hora de nombrar funcionarios haga distinciones. Evalúa sus perfiles y trata de poner los mejores hombres. En ese contexto, el radicalismo tiene hombre valiosos en todo el país. Una prueba de ello es que de los 23 distritos en que se conformó Cambiemos, en 17 las listas fueron encabezadas por radicales.