Con la democracia argentina en etapa de asentamiento, José Octavio "Pilo" Bordón se convirtió en protagonista clave de la "renovación peronista".
Fue gobernador de la Provincia entre 1987 y 1991. En ejercicio de esa función, privatizó la bodega Giol y apostó por la promoción de las exportaciones de productos mendocinos en el mundo.