Jorge Tanús es la cara de los legisladores peronistas rebeldes, que no quieren seguir a rajatabla los acuerdos políticos que firman los intendentes de su partido con el gobernador, Alfredo Cornejo.
Y aunque suele remarcar las críticas, incluso a través de las redes sociales, Tanús muestra también coincidencias con varias de las medidas adoptadas por el radical.
Durante esta entrevista, habla de lo bueno y malo que le ve al Gobierno, reconoce que al peronismo le va a costar remontar por el mal gobierno de Francisco Pérez y se lanza como uno de los posibles líderes de la renovación partidaria. Incluso, admite que buscará ser candidato a diputado nacional en 2017.
Por estos días, el diputado peronista está haciendo su propio duelo: durante ocho condujo la Cámara de Diputados y estuvo dedicado full time a la política. Ahora, ya sin ese cargo, el tiempo le sobra y se ha abocado con más fuerza a su profesión de ingeniero civil.
-¿Por qué considera que el peronismo debe adoptar una posición más dura frente al gobierno de Cornejo?
-Ya hicimos la autocrítica del final de nuestro gobierno, era necesario reconocer muchas cosas que se hicieron mal. A partir de esa autocrítica vino la etapa de colaboración, que empezó a finales de la gestión de Pérez, apoyando leyes poco deseadas pero necesarias para cumplir con el final del mandato. Y en los primeros cinco meses de este gobierno hemos colaborado en todo.
-El tiempo de la luna de miel se acabó entonces para usted.
-A partir del 1° de mayo, que podría considerarse el fin de la luna de miel, creo que es conveniente que el peronismo adopte una posición más de contralor del gobierno actual. La semana anterior ya tuvimos una actitud dura con el Zoológico. Vamos a ser críticos y controlar porque es parte de las funciones que nos dio la sociedad.
-Los intendentes tienen otra postura, más flexible...
-Sí y me parece bien. El gobierno es un conjunto de tareas que va más allá de las jurisdicciones. Me parece correcto que los intendentes interrelacionen su gestión municipal con la provincial. Y me parece que nuestra tarea como legisladores es complementaria. Vamos a tratar de que no colisionen. Tratamos de defender lo que los intendentes nos piden y a la vez controlar. Estamos recién arrancando nuestra tarea de oposición.
-Los intendentes en algún momento ya les han pedido que voten por algo o bajen el tono y lo van a volver hacer seguramente.
-Claramente en las leyes de Presupuesto, Avalúo e Impositiva es donde más enfáticamente nos pidieron colaboración. Pero luego no. En Seguridad coincidimos todos que es necesario mejorar.
-Con el intendente Giménez (San Martín) no han tenido roces...
-Nunca. Yo le hago ver algunas cuestiones de orden provincial y él me hace ver las dificultades y necesidades que tienen las comunas. Sí hubo algún ruido cuando se trató el aumento docente, pero no culpa de alguno de nosotros sino de Cornejo, que a pesar de que tenía los números para aprobar el decreto, parece que quería que votáramos a favor y no estábamos de acuerdo.
-¿Y qué van a hacer con la ley de prisiones preventivas, que se trata el miércoles?
-Mi opinión, porque hay mucha heterogeneidad jurídica en esto y yo soy ingeniero, es que voy a apoyar todas las leyes que mejoren la seguridad de Mendoza, sin discutir tanto la constitucionalidad o no.
-Analizando el gobierno, ¿qué le ve de positivo?
-Veo positivo el orden que le está imprimiendo a la administración del Estado; esperemos que eso tenga continuidad y vamos a colaborar para que siga así. También la austeridad. No hubiera resuelto de la misma manera el problema docente. Yo tenía una propuesta muy dura para acabar con las misiones especiales que me ocasionó incluso una pelea con el gobernador anterior y la directora general de Escuelas. Cornejo eligió el ítem Aula.
-¿Y qué es lo negativo?
-No me gusta que Cornejo trate de intervenir en la vida propia de los otros dos poderes y lo hace, a veces sutilmente, otras no tan sutilmente. Está interviniendo en parte de la actividad del Poder Judicial, algo que era muy común en otros gobiernos radicales.
-Pero el peronismo también lo hizo. Al procurador González desde Cazabán para acá quisieron sacarlo siempre.
-El peronismo se calentaba cuando el procurador no liberaba órdenes de allanamiento. Cornejo se mete en muchos aspectos de la Justicia.
-¿Carniello es un caso?
-Carniello es un caso, no me caben dudas. Innecesario además. Cornejo ahí tiene alguna influencia indirecta porque ha mandado a los legisladores radicales a votar contra el fiscal de manera sistemática. La influencia directa ahí es del procurador.
-¿En la Legislatura cómo interviene?
-Yo fui ocho años jefe de la Cámara de Diputados y nunca tuve el número para aprobar leyes sólo con el voto oficialista y debía ir a buscar al jefe del bloque opositor y negociar. Pero Cornejo no tiene esta necesidad porque tiene mayoría en ambas cámaras. Sin embargo llama a los intendentes peronistas para que influyan sobre nuestra opinión política.
-¿Y qué cree que quiere hacer?
-Joder.
-Tal vez tiene que ver con su estilo de gobernar, quiere controlar todo...
-Por ahí puede ser un síntoma de inseguridad. Él tiene que controlar bien y administrar bien para lo que fue electo: el Poder Ejecutivo. Pero no tiene que meterse con el Legislativo ni con el Judicial, que son uno para controlar y el otro para administrar justicia.
-¿Qué cree que le falta?
-Creo que está pendiente retomar alguna política de empleo en la provincia con un empujoncito del Estado, creo que urgentemente amerita recomponer un programa de obra pública. Además, el Alfredo se ha mostrado como ajeno a los problemas del agro, no sé si es que delega en algún subsecretario porque ni el ministro Vaquié se ha metido mucho.
-Le reconoce algo de recuperación de la autoridad del gobernador, que parecía perdida con Pérez.
-Yo estuve con Lafalla un tiempo en el gobierno, estuve con Jaque y el Paco. Creo que a los últimos tres que les vi autoridad en el gobierno fueron Lafalla, Iglesias y Jaque. El Alfredo tiene autoridad plena sobre el Poder Ejecutivo y al intentar imponerse sobre los otros dos poderes, no digo que está abusando, pero si que es innecesario. Él tiene autoridad, no hace falta sobreactuar.
-Pasó casi un año de la elección provincial. ¿Cree que al PJ le queda mucho tiempo aún de condena social por su mal gobierno?
-Depende una parte del peronismo y la otra de cómo le vaya al país y la provincia. Si el peronismo no renueva sus ideas, sus propuestas y muchos de sus dirigentes, creo que va a tener un largo tiempo de espera para volver al poder. Y si a los gobiernos nacional y provincial les va bien, también se va a demorar el retorno. Como está arrancando Macri, no le está yendo muy bien y eso genera que la gente empiece a mirar para otro lado.
-Pero en Mendoza el PJ está muy dañado...
-Las dos veces anteriores que perdimos siempre hubo una recuperación, pero es necesario que se renueve y proponga cosas distintas. ¿Cuánto va a durar esa recuperación? Ojalá que sean cuatro años, como después del ´83, pero puede pasar como en el '99 y estar ocho años fuera del poder.
-Cómo debe darse esa renovación. Algunos quieren borrón y cuenta nueva incluso con las líneas internas, como los Félix. Ustedes los azules parecen querer mantenerlas como ahora...
-Creo que hacen falta dirigentes que recorran Mendoza y se hagan conocer ellos y sus propuestas. Me parece bien lo de Félix, me parece bien lo de Alejandro Bermejo. Yo estoy haciendo lo mismo, caminando la provincia.
-¿Y los plazos cuáles son?
-No tengo ninguna duda que la conducción del peronismo se va a resolver en las primarias del año que viene, a pesar de que antes debemos resolver la conducción partidaria sin desgastar a la sociedad.