Jorge Pérez Cuesta, está entusiasmado con el cambio de Gobierno en Argentina. Cuenta anécdotas y habla con soltura en el living de su oficina de la Bolsa de Comercio, entidad que preside y se ve obligado a repartir el tiempo entre esa institución y ProMendoza.
Se encuentra en una etapa de su vida en la que siente que tiene que trabajar por Mendoza pero "desde otro lugar". Integrante de una familia tradicional mendocina que siempre estuvo en diferentes negocios, desde el supermercadismo, pasando por la apertura del Mendoza Plaza Shopping, que vendió en el 2004 al grupo IRSA, hasta desarrollos inmobiliarios y vitivinícolas.
-¿Otra vez Brasil complicando la economía?
-La crisis política que vive Brasil hay que tomarla con cuidado y cautela. Yo mismo me asusté cuando vi que cayó el real y al final fue una devaluación del 6%, no hay que adoptar medidas a tontas y a locas. Creo que es un tema delicado pero el problema fundamental está dado en la necesidad de abrir nuevos mercados y ProMendoza viene trabajando en eso, desde hace un año busca suplantar mercados o agregarlos a Brasil. De todas formas hay que ver cómo lograr una competitividad que nos permita estar en el mercado brasileño.
Brasil es un mercado importante pero no es el único y tenemos que trabajar para que los productos que no mandamos a Brasil, lo llevemos a otros mercados. La falta de solución del problema político en Brasil nos complica.
-Reemplazar mercados por Brasil se dice desde hace mucho…
-Pero hemos estado en China, vamos a estar más en Estados Unidos. Estuvimos en Colombia, México y Perú, esto es nuevo y no se ha hecho. Estaba previsto abrir nuevos mercados antes del problema político de Brasil. Nos adelantamos, no por la crisis de Brasil, sino porque queríamos abrir nuevos mercados como en Panamá.
-Qué acciones tiene previstas para ProMendoza
-Creo que ProMendoza ha hecho una labor y se creó con una razón de ser importante en su momento pero hoy la matriz productiva ha cambiado y ProMendoza debe cambiar. Si la mantenemos como estaba hace 20 años estamos equivocados. El mundo, Argentina y Mendoza cambiaron. Esa evolución de cambios la empezó Gabriel Fidel y la continuaremos y profundizaremos como por ejemplo, definir la matriz productiva de Mendoza.
Hay que avanzar en las exportaciones y también en la atracción de inversiones internacionales, nacionales y hasta locales. Vemos el informe de la Fundación Ideal que hay 188 empresas que dejaron de exportar, tenemos que trabajar para que más empresas exporten.
Definir los mercados que vamos atacar, no tenemos un gran presupuesto como otros países u otras provincias entonces hay que hacerlo rendir en lo que más beneficios nos genere, venderle a China no es lo mismo que a Costa Rica. Macri fue claro al decir en China que somos grandes productores de alimentos; ahora bien, hay que saber qué necesitan para que se lo preparemos. Si quieren vino hay que saber si quieren tinto o no y se los vendemos.
-Cómo imagina esto de definir la matriz productiva. Es un tema recurrente y aquí estamos.
-Tenemos que replantearnos qué Mendoza queremos y qué industria necesitamos para esa Mendoza. Nuestra provincia está en plena etapa de cambios.
Mendoza no tiene claro dónde quiere ir, hay dicotomías, minería sí, minería no, queremos exportar pero no mucho porque se complica, queremos que suba el dólar pero que no impacte en precios. No tenemos muy claro dónde vamos. Pasa en Mendoza y en todo el país esta situación.
La provincia tiene sectores muy competitivos como la metalmecánica, ya no hablo de Pescarmona solamente, sino también del taller el chico que produce bombas, son sectores a los que hay que orientarlos. Además están en buena situación con el dólar que tenemos. Si no queremos minería o petróleo eso es otra cosa.
También hay que ver si se hace un lobby importante para que Mendoza tenga participación importante en Vaca Muerta, para que nuestras empresas puedan estar ahí y beneficiarse.
-¿Qué cambios entiende que deben concretarse en la matriz productiva?
-Hay que redefinirla y eso implica un estudio que incluya varios sectores: empresarios, el gobierno, los sindicatos. Hay que tener claro que en esos diálogos, tenemos que definir la Mendoza que podemos hacer, no la que nos gustaría. Hay que pensar un proyecto y definirlo.
-Está la tensión sobre la devaluación o apelar a otros mecanismos.
-Creo en la libertad de los mercados, sin dudas un dólar más alto nos mejora pero impacta rápido en los precios y en los costos. La experiencia del 2001 fue la única que conozco en donde se devaluó la moneda el 300% y se creció el 30%. También había una capacidad ociosa muy alta y entonces se podía crecer sin muchos problemas.
-Bueno pero devaluó Kicillof, Macri y ahora muchos empresarios entienden que el valor del dólar no les sirve...
-Veo que por primera vez en la historia, el Banco Central se está manejando independientemente del ministerio de Economía. El Central define pautas y el ministerio de Economía juega su papel por otro lado y en el mundo es así. Qué ocurre, qué alternativa tenés cuando hay herramientas que uno no puede tocar como el dólar. Hay que buscar la competitividad, no es fácil y se busca en otras cosas.
Hay que mejorar la logística, es caro para nosotros y nos complica la competitividad con Chile en el caso de Mendoza. Otro tema es que Chile tiene negociaciones con muchos países con los que puede exportar sin pagar tasas o sólo el 10%, nosotros no tenemos acuerdo con ninguno y pagamos el 40%. La diferencia es imposible de sostener.
El problema es que estamos dentro del Mercosur y las negociaciones no son individuales, son de bloque a bloque, no podemos negociar con la Comisión Europea ni con China. Esto es difícil. El Mercosur tuvo una razón de ser en su momento, no sé si debería estar vigente, a los mendocinos nos afecta mucho porque nos limita en la concreción de acuerdos.
-También se mejora la competitividad con beneficios impositivos.
-Están tratando de bajar algunos impuestos que son distorsivos en las importaciones y lo han demostrado en los retornos para acelerarlos.
No podemos correr si todavía no caminamos, todavía falta para correr. Argentina tiene que tener consciencia de la importación y tiene que tener valor agregado y generar trabajo. Si no conseguimos un crecimiento en el empleo todo fracasa. Hay que generar valor agregado y mayor cantidad de mano de obra, si esto no pasa es complicado.
Balance sobre el Gobierno Nacional y Provincial
-¿Qué balance hace del Gobierno Nacional?
-Está entrando en el camino, creo que le ha costado hacerse cargo de lo que venía. No sé si no esperaban que fuera así o creían que era más fácil solucionar algunos problemas. Están haciendo las cosas bien, se están tomando su tiempo. Veo una Argentina diferente en el trato, en la gente y faltan cosas por hacer. Le falta un poco más de cancha, de calle, están haciendo las cosas en el laboratorio y la gente está en la calle, pero van bien. El problema más grave que tienen es el déficit fiscal, lo van arreglando gradualmente.
-Y cómo ve al gobierno provincial
-La reforma en el déficit fiscal la ha realizado antes que la Nación, tomó conciencia de la realidad, de lo que le dejaron. Han logrado que el déficit fiscal primario esté equilibrado. Mendoza va más rápido en la caída del gasto que la Nación.
Los recuerdos de su padre Ernesto
Su padre Ernesto, fundó los supermercados Asa y Gigante y acompañó a José Octavio Bordón como ministro de Obras Públicas.
"Mi padre me marcó fuerte el concepto de la justicia y la corrección que nos impulsó para continuar, y así como lo aprendí yo, se los enseñe a mis hijos. Algo que nos impactó mucho fue que el peor pecado que había era el de omisión, se podía pecar por errores pero no por dejar de hacer y también hice lo mismo con mis hijos. También me hizo sentir el amor por Mendoza. Cuando vendió el supermercado me dijo que Mendoza le había dado mucho y empezó en la Unión Industrial y trabajaba por la provincia desde otro lugar para devolver algo de todo lo que Mendoza le brindó. Por esa situación atravieso hoy yo, estoy en la Bolsa de Comercio por eso. Me retiré de la empresa y los dejé a mis hijos por lo que mi padre me inculcó, no quería opacarlos y eso me permite hacer cosas por Mendoza".
Perfil
Jorge Pérez Cuesta (61)
Está casado hace 36 años y tiene 4 hijos. Su negocio familiar, el Grupo Pérez Cuesta, cuenta con Cyssa (Construcciones y Servicios Sociedad Anónima) y Bodega y Viñas de Pérez Cuesta. Se dedican al desarrollo de centros comerciales, barrios privados, habitacionales y otras empresas de menor importancia. Está más retirado de la empresa.
“Ahora se ocupan más mis hijos Andrés, Ignacio y mi hermano Gonzalo. Estoy en el directorio y de vez en cuando me preguntan algo”.