“Me resulta admirable que el jurado del Premio Princesa de Asturias haya tenido la valentía de distinguir a un grupo humorístico”, arranca diciendo Jorge Maronna, miembro fundador y actual integrante del grupo Les Luthiers, al que ayer se anunció como ganador del Premio Princesa de Asturias de Comunicación y Humanidades 2017.
“El humor siempre estuvo menospreciado -sigue Maronna-, en un estante más abajo que las demás disciplinas. Y sin embargo, esta vez se impuso por encima de nombres ilustres como el cineasta Martin Scorsese o el actual director de The New York Times (Arthur Ochs Sulzberger jr.).
Y sí, los argentinos Les Luthiers lograron imponerse a otros 27 nombres, entre ellos afamados periodistas como el director del Washington Post, Martin Baron, y la inglesa Cristiane Amampour, responsable de CNN, además del filósofo mexicano Miguel León-Portilla, el dibujante José María Pérez “Peridis” y el biólogo español Francisco José Ayala.
El jurado del prestigioso galardón español, que dio a conocer su fallo en la ciudad de Oviedo, destacó que el conjunto argentino “es uno de los principales comunicadores de la cultura Iberoamericana desde la comunicación artística y el humor”.
Asimismo señala que “su original tratamiento del lenguaje, de los instrumentos musicales y de la acción escénica atrae a cientos de miles de espectadores de todas las generaciones que han convertido a Les Luthiers en un espejo crítico y un referente de libertad en la sociedad contemporánea”.
Todavía “feliz y aturdido también”, según confesó, Maronna atribuyó el reconocimiento a “la influencia de estar cumpliendo ahora 50 años de actividad en un camino bastante recto”.
Antes de Les Luthiers, que ya habían aspirado a esta distinción pero en el rubro de las Artes, el único argentino galardonado con el Princesa de Asturias era el mendocino Joaquín Salvador Lavado, Quino, creador del popular personaje “Mafalda”.
Maronna integra el conjunto desde 1967, al igual que Marcos Mundstock, Carlos Núñez Cortés y Carlos López Puccio, a quienes actualmente se suman Horacio “Tato” Turano y Martín O'Connor, dos remplazantes para otro fundador, el genial Daniel Rabinovich, fallecido en agosto de 2015.
“Este premio en particular es flor de hito, es un monumento que recibimos en momentos en que el grupo sigue vivo, sano, en buen estado y tanto o más exitoso que antes”, postuló Maronna.
-Les Luthiers tienen un vínculo largo y fecundo con España...
-Sí, hay mucha historia. Tenemos un especial recuerdo agradecido a Pepe Caturla, que fue el empresario que nos llevó a España tras vernos en Mar del Plata en 1974, pero cuando entonces fuimos a Madrid y Barcelona se dio una gira un poco pálida que lo afectó económicamente. Sin embargo, siete años después Caturla volvió a intentarlo y ya fuimos un éxito importante. Entonces empezó a llevarnos también a provincias y desde allí no paramos.
El plan español de Les Luthiers se replicará en setiembre próximo con una gira por Sevilla, Madrid, Salamanca y Mérida para montar una nueva versión de “Chist!”, el show de 2011 que también fue furor en España.
-Y actualmente, ¿en qué andan?
-No estamos escribiendo nuevos números pero la gente sigue disfrutando los clásicos como si fueran novedosos. Este fin de semana estrenamos en Rosario una nueva antología, “Gran Reserva”, que llevaremos a Mendoza en agosto (ver aparte).
-¿Y cómo es "Gran Reserva"?
-Es un lindo seleccionado de obras muy musicales. Hay bastante más música que en los últimos espectáculos y no tiene ni una estructura especial ni ningún hilo conductor.
50 años de risas
“Como dicen los libros de sexología, cuantos más años a cuestas, más te cuesta y menos te acuestas”, son algunas de las bromas con que han deleitado a su público Les Luthiers, siempre vestidos de smoking y moñito negro.
O también:
“-Ahora que cayó el muro de Berlín nosotros nos preguntamos: ¿fue error de los burócratas? ¿error de la doctrina?
-Error del arquitecto”.
Todos firman sus propios textos y la música de sus obras, que ejecutan sobre el escenario con instrumentos de creación propia, a menudo hechos con objetos de la vida cotidiana, como el Tubófono Silicónico Cromático, el Yerbatófono d’Amore, el Latín o Violín de Lata y el Lirodoro, entre otros.
Igualmente, en su derroche de ingenio, crearon el personaje de Johann Sebastian Mastropiero, un compositor musical ficticio, “autor” de muchas de sus composiciones.
El grupo arrancó con siete integrantes en 1967, pero seis años más tarde falleció su fundador, Gerardo Masana.
Actualmente cuenta con seis miembros: Jorge Maronna, Marcos Mundstock (ambos desde el inicio), Carlos López Puccio, Carlos Núñez Cortés, Horacio ‘Tato’ Turano y Martín O'Connor.
En 2015 sufrió un duro golpe con el fallecimiento del muy celebrado Daniel Rabinovich, miembro inicial del conjunto. Carlos Núñez Cortés dijo de Rabinovich que era “tal vez el más gracioso de todos nosotros” y lo calificó como “descendiente” del maestro mexicano del humor, Cantinflas.
Ante el rey
El Premio Princesa de Asturias consiste en la reproducción de una escultura de Joan Miró, 50.000 euros, un diploma y una insignia que tradicionalmente entrega el rey Felipe en una gala que se celebra en octubre en el Teatro Campoamor de Oviedo y por la que Les Luthiers deberá reprogramar una serie de presentaciones que para esa época iba a tener en Lima, Perú.
De acuerdo con los Estatutos de la Fundación Princesa de Asturias, que toma el nombre de la heredera al trono en España, la princesa Leonor, el galardón se otorga en reconocimiento a aquellos “cuya labor contribuya, de manera extraordinaria y a nivel internacional, al progreso y bienestar social a través del cultivo y perfeccionamiento de las ciencias y disciplinas del conjunto de actividades humanísticas y en lo relacionado con los medios de comunicación social”.
Anteriores ediciones de los premios Princesa de Asturias de Comunicación y Humanidades han recaído en diarios y medios de comunicación latinoamericanos, así como en el escritor y filósofo italiano Umberto Eco (2000), en el buscador Google (2008) y en la fotógrafa estadounidense Annie Leibovitz (2013).
Los Premios Princesa de Asturias incluyen, además de Comunicación y Humanidades, las categorías de Artes, Letras, Ciencias Sociales, Deportes, Tecnología, Cooperación Internacional y Concordia.