Johnny Depp presentó en Venecia el drama sobre mafiosos “Pacto criminal” (“Black Mass”, en el original), cuya elogiada actuación bien podría valerle una nominación al Oscar.
Pálido, rubio y calvo, Depp vuelve a mostrarse irreconocible como el mafioso de Boston que existió en la vida real James “Whitey” Bulger, que construyó un imperio criminal mientras actuaba como informante del FBI o “asesor criminal profesional”, como lo llama un personaje.
El Bulger de Depp es carismático, aterradoramente calmado y totalmente despiadado. “Encontré el mal en mí hace mucho tiempo y lo he aceptado”, dijo Depp a reporteros en Venecia. “Somos viejos amigos”.
Cientos de admiradores acamparon junto al Palacio del Cine, horas antes de que Depp recorriera la alfombra roja para el estreno mundial del film que dirigió Scott Cooper. Muchos la califican como su película de regreso, pero Cooper señaló: “Hasta donde yo sé, Johnny no se ha ido a ninguna parte”.
“A diferencia de la mayoría de los actores, Johnny asume un riesgo con cada papel que interpreta y creo que artísticamente es muy valiente”, dijo el director.
Cooper dijo también que había quedado fascinado con la “intersección de política y crimen” en el Boston de los años 70 y 80. El hermano de Bulger, Billy, interpretado en el film por Benedict Cumberbatch, fue un poderoso senador estatal. Su contacto en el FBI era John Connolly (intensamente encarnado por Joel Edgerton), otro chico duro del sur de Boston dividido entre la lealtad de la niñez y su deber como agente del orden público.
Cooper narra el relato de poder y traición sin melodrama en un film austero y por momentos aplastadoramente violento. “Sin muchos rasgos estilísticos para que todo pareciera visto a través un video de vigilancia”, explicó Cooper, cuyos créditos incluyen el drama “Loco corazón” (“Crazy Heart”, 2009) en el que Jeff Bridges interpretaba a un viejo cantante de música country que se enamora de una joven periodista.
Bulger desapareció en 1995 y pasó 16 años como uno de los fugitivos más buscados de los Estados Unidos hasta que fue capturado en California en 2011. A sus 86 años, sigue cumpliendo hoy su sentencia de cadena perpetua.
Depp pidió conocerlo, pero Bulger “declinó respetuosamente”. Sin embargo, se sintió gratificado cuando el abogado de Bulger, J.W. Carney Jr., visitó el set y “dijo que podía sentir a su viejo amigo en lo que (el actor) estaba haciendo”.
“Creo que un personaje como James Bulger simplemente hay que abordarlo como un ser humano”, dijo Depp. “Nadie se levanta por la mañana, se afeita o se cepilla los dientes y se mira al espejo para decir ‘soy malo”.
“Él era complicado... Podía ayudar a una anciana con sus bolsos de supermercado y, 10 minutos después, reventarle a alguien el cráneo”.
El papel de Depp en el film, que se estrena en los Estados Unidos el 18 de setiembre y en nuestro país se anuncia para el 22 de octubre, probablemente genere comparaciones con la transformación de Marlon Brando como Don Corleone en “El padrino”.
A Depp probablemente no le moleste. Dijo que sus héroes siempre han sido actores camaleónicos: “John Barrymore y Lon Chaney Sr. y, ciertamente, Marlon Brando”.
“Siempre quise tratar de ser un actor de carácter, más que el chico del póster que trataron de hacer de mí hace unos 100 años”, dijo el ex ídolo adolescente que cumplió 52 años el 9 de junio.