Hay un periodista que entre las décadas de los 60 y 80 conectó a Hollywood con Mendoza, a través de sus textos en Los Andes. Se llama León Balter y es "el señor Hollywood".
Balter fue corresponsal de este diario durante varios años en Estados Unidos y realizó unas 500 entrevistas a las estrellas más destacadas de aquel momento.
Personajes legendarios como Kirk Douglas, Paul Newman, Robert Wagner, Ingrid Bergman, Bette Davis, Susan Hayword, David Jansen, Frank Sinatra, Bing Crosby, Ray Conniff, Walt Disney, Walter Lantz, Alfred Hitchcock, Federico Fellini, Billy Wilder, Oliver Stone pasaron por nuestras páginas gracias a él.
Actualmente Leo Balter, con sus 90 años, vive en Buenos Aires y es uno de los mendocinos que trascendió las fronteras del periodismo de espectáculos. Desde 1956 hasta fines de 1982 se radicó en Estados Unidos. Hoy sigue ligado al mundo del cine y además es miembro fundador de los Globo de Oro, entre otras instituciones periodísticas estadounidenses.
El Big Duke, entrevistado por León
Uno de los filmes más icónicos y representativos del western es "El álamo" ("The alamo"). Pues, nuestro diario tuvo, gracias a León, la posibilidad de acercar a los mendocinos el momento justo de ese rodaje.
Es que bajo el título "John Wayne filma actualmente la superproducción The Alamo", León publicó una extensa entrevista con quien es una leyenda del western. La nota fue publicada por Los Andes el domingo 2 de octubre de 1960 y dice así:
"En BEVERLY HILLS, California, John Wayne es un gigante. No sólo de estatura sino que su nombre se proyecta como un sinónimo de Hollywood. La magia de su nombre es como un magneto para las multitudes que siguen sus películas, que por esa razón siempre son éxitos seguros.
"En esta tarde veraniega, me acerqué a los estudios de la Twentieth-Century Fox, en donde John Wayne está filmando 'Go North', su primera producción después de haber realizado la monumental 'The Alamo', que se estrenará próximamente.
"John Wayne estaba indicando, junto con el director Hathaway, cómo realizar los efectos para la escena que se iba a filmar. De pie y llenos de barro esperando el momento de acción, estaban también Ernie Kovacs, Stewart Granger, Mickey Shaughnessy y el nuevo ídolo de la juventud estadounidense, Fabian. Otros artistas de esta película de ambiente 'alaskeño', son la distinguida y hermosa Capucine, con quien ya he departido en otras oportunidades, Stanley Adams, Frank Faylon y Stephen Courtleigh, todos ellos veteranos en esta clase de producciones. Representa un tremendo esfuerzo económico el reunirlos a todos ellos en una película.
"John Wayne se negó en un principio a fotografiarse conmigo, mostrándome toda su caracterización 'embarrada'... pero al hacerme conocer como cronista 'latino', miró con resignación sus manos sucias y posó a mi lado. Luego nos pusimos a un costado en donde nos sentamos en unos incómodos escalones, y aproveché para dirigir mi andanada de preguntas sobre su producción 'The Alamo', a pesar de que esa película será distribuida por United Artists... y nosotros estábamos en la 20th Century Fox.
Luego de una breve charla, y yo sin tener muchos conocimientos históricos sobre esa batalla entre norteamericanos y mexicanos, le formulé una pregunta fundamental, basada en varios factores que luego enumeraré:
-Dígame, Mr. Wayne, ¿'The Alamo' no llegará a herir susceptibilidades en México?
-No, absolutamente no -fue su respuesta-. Para muestra le diré que en una escena digo a mi lugarteniente: 'Hoy hemos matado a muchos valientes'. No, por el contrario, he puesto especial cuidado de que sea reflejada en la pantalla la verdad histórica, de manera de no crear polémica con nuestros vecinos mexicanos, los que, junto con la gente adepta al cine de Sudamérica, siempre me han hecho llegar palabras de aliento y felicitaciones. Ruego que transmita por intermedio de su diario mi reconocimiento y mis saludos.
Factores
Como comentario personal que le transmití a Wayne, le dije que unas semanas atrás en el 'California Club', tuve oportunidad de tomar una cerveza alemana con el famoso torero Carlos Arruza, que justamente desempeña el papel de teniente mexicano en su producción. A él le pregunté si Wayne se había ajustado a la verdad histórica, Arruza me contestó: 'Yo le encarecía a John de tener sumo cuidado en ese punto, debido al gran sentimiento nacional mexicano. Hubieron varias escenas que serán magníficas, mostrando a México en pie... pero habrían otras que creo que inevitablemente serán discutidas por mis paisanos'. Al escuchar ese comentario John Wayne me dijo que su película no podrá ser mal interpretada, ya que en ningún momento su superproducción de más de 3 horas de duración y a un costo superior a los 12 millones de dólares, correrá ese peligro de ser discutida:
'Hemos cuidado todos los detalles y son más de 14 años que estoy trabajando en este proyecto de The Alamo, y estoy seguro que nuestros hermanos mexicanos no se sentirán heridos".
“Anda al Norte” o “Anda a Alaska”
Las palabras de John Wayne las recibí con alivio porque su producción será, seguramente, la más importante a presentarse en esta temporada, junto con otra superproducción de Kirk Douglas titulada 'Spartacus', que además de disputarse entre ellas dos, el título de la película más costosa filmada en Hollywood, pelearán por los votos de los miembros de la Academia para conseguir para sí, la mayor cantidad de Oscares posible.
Wayne miraba con impaciencia hacia el set con motivo del atraso que se venía acumulando por esperar un aparato que se iba a aplicar en la espalda de Ernie Kovacs, a fin de que John lo 'arrastrase' por el suelo en forma fácil. Aproveché la oportunidad de ese atraso, para preguntarle sobre la película que estaba filmando, o sea 'Go North' o 'Go Alaska' (titulo aún en discusión).
´La acción se desarrolla en 1900, en Nome, Alaska, en donde mi socio y su hermano (Granger y Fabian, respectivamente) y el perro de ellos, todos, habíamos encontrado oro y nos habíamos convertido en personas ricas. La acción luego se concentra en que yo tengo que traer a la novia de mi socio, la cual, para sorpresa de todos, se había cansado de esperarlo y había contraído matrimonio con otro. Muchas incidencias al margen o directamente conectadas a eso, y de resultas de ellas conocí a otra mujer (Capucine) que decidí oficiara de reemplazante de la que se había casado... Luego de muchas otras y variadas incidencias que dan a la película el viso de comedia buscado, tiene la producción el lógico final del agrado de todos.
El resumen más breve imposible. Mientras tanto Ernie Kovacs se había acostado en el suelo sobre el 'aparato' y comenzaban los ensayos para esa toma a filmarse, por lo que John Wayne me saludó estrechándome la mano y dando por terminada la entrevista. 'Hasta luego, John, y buena suerte'".