A Jennifer Aniston (47) le gusta mucho reír, porque piensa que la risa la mantiene joven. Lo confiesa este mes en la nota de tapa de la revista Bazaar y lo confirmó en una conferencia de prensa en West Hollywood, donde la actriz promocionaba Enredadas, una película en la que comparte una escena por primera vez con Julia Roberts, y que se hoy estrena en Mendoza. Jennifer dice que su esposo Justin Theroux es quien más la hace reír, y en segundo lugar el actor Jason Sudeikis, quien también trabaja en este filme de Garry Marshall.
Enredadas representa una nueva unión entre el famoso director y Julia Roberts (juntos hicieron Mujer bonita), pero la primera ocasión de Aniston de ser dirigida por él.
“Puedo decir que casi ni miré el guión, la sola idea de trabajar para Garry Marshall me hizo aceptar el proyecto. Me dijeron vagamente que iban a ser diferentes historias sobre el Día de la madre y que dirigía Garry, y con eso fue suficiente”. La película le permitió también filmar por primera vez con su amiga Kate Hudson, a quien conoce desde hace 20 años.
“Es una pena que la experiencia haya sido tan breve. Fueron dos días de filmación con Kate y uno solo con Julia (ver La escena...), pero estuvo genial. Trabajar con Julia es muy intimidante, ojalá se repita”, comentaba la actriz de Friends, más rubia que de costumbre, en un color similar al que la hizo famosa con aquel corte que dio la vuelta al mundo cuando ella era Rachel Green.
El elenco de Friends se reunió por primera vez en febrero para celebrar al productor de la serie, y Jennifer dice que la pasó genial. “Fue grato, como si el tiempo no hubiera pasado. Y después nos fuimos todos juntos a cenar”, recuerda.
En Enredadas Aniston es Sandy, una mujer divorciada con dos hijas a la que su marido le da la noticia de que se casó de nuevo. La nueva esposa, y flamante madrastra de sus hijos, es una chica joven (Shay Mitchell, de Pretty Little Liars), y eso le revuelve el estómago a su personaje, especialmente porque llega el Día de la madre y sus hijos tienen ahora doble festejo.
A diferencia de Julia y Kate, y a pesar de que lo han predicho las revistas sensacionalistas desde hace años, Jennifer todavía no es madre, aunque su mejor amiga, Courtney Cox (Mónica en Friends) lo es y puede entender lo complicado que puede ser a veces.
“La maternidad es algo serio, lo he visto con mi madre, con mis amigas que son madres y con las madres de mis amigos. Siempre aprecié a las mujeres que educan a sus hijos solas y a las que trabajan y tienen hijos. Yo hice de mamá en muchas películas, y creo que su trabajo es increíble”.
Hace unos años Aniston le confesaba a la revista The Hollywood Reporter que su relación con su madre, una actriz, no había sido buena.
Sin embargo, en esta entrevista relativizó el asunto, diciendo que creía haber heredado de ella el buen humor y también ciertos nervios que le agarran cuando está al volante. “Soy una conductora nerviosa y cuando manejo ella siempre me grita, y eso me pone más nerviosa” contó ahora. “Nuestra relación ha tenido buenos y malos días, pero es mi madre y la amo”, concluyó.
En cuanto a ser mamá ella, biológicamente o por adopción, no es algo que planee discutir en una conferencia de prensa, aún cuando suponemos que lo sueña, y se trate de una película que tiene ese tema como eje central. “Si algún día un chico aparece en la foto familiar, obvio que voy a tener mi propio Día de la madre”, respondió evasiva y a la defensiva. Ya había aclarado que la vida de casada la hace feliz.
“Eso es lo bueno de esta película de Garry, que muestra distintos tipos de madres y de unidades familiares que coexisten hoy en día, y que lo hace con humor”, elogió al director, que se alegra de haber podido contar con ella.
Esta es la primera película que filma después del drama Cake, que produjo y que le ganó una nominación al Globo de Oro, premio que ya había ganado por su interpretación de Rachel Green. Pronto se vienen otros roles, como el de la madre de un joven soldado que lucha en Iraq en la película Yelow Birds, también producida por ella.
Dice que tiene que amar mucho un proyecto para querer dejar a su esposo, a su casa y a sus perros. Su mansión en Bel Air está llena de fotos de ellos y también de Jennifer con Justin. Por eso, dice, más que el Día de la madre su feriado favorito es el Día de acción de gracias.
“Eso te permite quedarte en tu casa, en familia, comer rico, dormir una siesta y seguir comiendo”, comenta. Claro que lo dice una obsesiva amante de la gimnasia, que realiza una hora diaria de ejercicios cinco días a la semana. Eso y reír, aparentemente, es su fórmula para alargar la juventud.
La escena que filmó con Julia Roberts
Esta semana, en la presentación de la película Enredadas en un teatro de Hollywood Boulevard, Julia Roberts y el director Garry Marshall recordaban que muy cerca de ahí habían filmado en 1990 muchas escenas de Mujer bonita. “Cuando hicimos esa película Julia no era conocida, podía caminar tranquila por la calle, estoy orgulloso de todo lo famosa que es en la actualidad. Hacer una película con Julia te garantiza que, una vez que se sube a bordo, todos los demás actores acepten rápidamente”, decía humildemente el director.
Y ése es también el caso para Jennifer Aniston, que agradece que Julia le haya dicho a un conductor televisivo que ella es una mujer “hot”. “Hot es ella, ¿vieron sus piernas? Julia es icónica”, la elogiaba Jennifer en la entrevista.
“Nos reímos mucho juntas, pero estábamos trabajando. Fue sólo una escena, pero debo confesar que me puse un poco nerviosa y la llamé Julia en vez de Miranda, como su personaje”. El blooper se puede ver al final de la película, que las muestra juntas casi forzadamente, quizá porque después de empezar a filmar Julia se lamentó públicamente de no poder cruzarse con Aniston y tal vez Marshall quiso hacerle ese favor.
La escena que une a Miranda (conductora de TV) y a Sandy, o a Julia y a Jennifer, la encuentra a la primera firmando uno de sus libros y a la madre de dos hijos, que es también diseñadora de interiores, tratando de que la contrate para renovarle la escenografía del programa.
Sucede uno de los tantos enredos del filme, ideal para que Julia ría (al menos en el blooper) con esa sonrisa que vale millones de dólares.
Roberts, casada con el director de fotografía Daniel Moder, tiene tres hijos (los mellizos Hazel y Phin -11- y Henry, de 8) y asegura que planea pasar el Día de la Madre, que en los Estados Unidos se celebra el domingo 8 de mayo, como a Jennifer le gusta: en su casa y en compañía de sus seres queridos.