Con los festejos vendimiales finalizados, para Javier Allub, presidente del Consejo Empresario Mendocino -CEM-, es un buen momento para analizar aspectos de la coyuntura como la presión impositiva, los aumentos de combustibles, tarifas y toda la escalada de precios que arrastran a su paso. "La inflación es un flagelo difícil de controlar y ciertamente desalienta a los inversores", dijo en su entrevista.
Justamente desde el CEM este viernes organizaron el "Foro de Inversiones" con el espíritu de atraer nuevos y mayores flujos de dinero a la provincia. Durante la entrevista alentó a desarrollar sectores estratégicos como las tecnologías relacionadas al mejor uso del agua y la extracción de petróleo.
-¿Qué desafíos enfrenta la provincia para atraer capitales?
-Si bien en nuestro Foro propusimos un sistema de trabajo de 10 mesas que nucleaban a los distintos sectores de la economía, hay actividades que tienen un gran potencial para desarrollarse.
-¿Cómo por ejemplo?
-La minería. También está el caso de las nuevas tecnologías para la extracción de petróleo, donde el gobierno está impulsando una reglamentación para poder hacerlo de manera sustentable y económicamente viable. Entonces el tema de energías renovables tiene muchísima potencialidad de desarrollo. Otro tema que nos interesa es la gestión del agua; si bien es algo que existe, necesitamos mejorar la cultura de su uso tanto por parte de la sociedad como de las empresas, y necesitamos tecnificarlas porque justamente no le sobra a la provincia. Debemos aprender a utilizarla y administrarla; eso lo hacemos con tecnología que requiere inversión. La provincia tiene muchos frentes para poder abordar los distintos sectores económicos, y eso es importante para poder atraer inversiones.
-Sin embargo la minería es un tema sensible para la sociedad en su conjunto...
-Es cierto. Creo que lo que nos ha pasado a los mendocinos es que todos los primeros debates que se hicieron sobre esta actividad no sé si estuvieron bien orientados. Yo creo que el debate que se debe la sociedad en su conjunto y los sectores más especializados no es el extremo de minería sí o no, sino si se puede hacer minería y de qué forma. El CEM presentó un estudio sobre este sector en conjunto con el Cippec y la Fundación Vida Silvestre. Lo que siempre hemos aportado para contribuir al enriquecimiento del debate es la información objetiva no sesgada ni para un lado ni para el otro. Y la verdad es que este gobierno cuando asumió hizo algo bueno como fueron las mesas de debate, donde les daba la posibilidad a los distintos actores de la sociedad de participar. Eso fue algo muy importante. Por lo menos lo que nosotros tenemos es que en las últimas encuestas sociales que se han hecho hay mucha gente que ve que si las cosas se hicieran de manera responsable y sustentable no es inviable hacerlas: ahora hay que definir en dónde y de qué manera. Tenemos ejemplos de países exitosos, como también de otros en los que no ha funcionado. En los buenos ejemplos la minería convive con la agricultura, (hay que preguntarse) cómo hacen para llevarla adelante y practicarla. Lo que yo sí creo, más allá de la actividad que queremos poner por adelante, es en la pregunta sobre (con) qué actividades vamos a generar valor agregado y buenos ingresos para la gente.
-¿La presión impositiva desalienta al nuevo inversor y también a todos aquellos que buscan expandir su negocio?
-Seguro. Nunca ha sido un factor menor, ni a nivel nacional ni a nivel provincial. Creo que en esencia el Pacto Fiscal es un punto de partida porque que una provincia pueda proyectar de acá a 5 años poder eliminar o reducir fuertemente la alícuota de Ingresos Brutos en actividades principales es algo que no me había tocado vivir.
Siempre lo que he vivido en esta provincia es que los impuestos suben; que ahora haya una perspectiva de baja de ciertas alícuotas es algo muy positivo. El Gobierno en parte está tratando de plantear un camino muy difícil y muy duro, porque en muchos aspectos es la frazada corta que si sacan de un lado necesitan de otro, pero es el camino. Tampoco creo que se pueda reordenar el país de la noche a la mañana luego de tantos años en en que se generó un sistema tan distorsivo.
El debate que se debe la sociedad mendocina en su conjunto y los sectores más especializados no es el extremo de minería sí o no. Se debe analizar si se puede hacer minería y de qué forma."
-Por tu perfil empresario estás en contacto con el sector de petróleo y energía
-Así es, llevamos 86 años de relación comercial con YPF. Y hemos sorteado exitosamente los cambios y vamos por la tercera generación.
-El agobio en el precio de los combustibles, ¿puede llegar a tener algún tipo de amesetamiento en el año?
-Es muy difícil de predecir. Ahora el combustible está atado al precio del barril, el tipo de cambio y al precio de los biocombustibles. Hay que tener en cuenta que los combustibles tienen un porcentaje de metanol y biodiésel. La verdad que no es fácil soportar los incrementos, ni para la empresa petrolera ni para los intermediarios, que somos nosotros, y menos para el usuario final. En un futuro otro de los puntos a rever será el componente tributario. Pero si el gobierno reduce impuestos en combustibles tiene que tener la posibilidad de obtener ese recurso de otro lado o de administrar de otra manera.
-¿Es negativo tener un mercado liberado de precios?
-Depende en el momento en que te agarra. Si el precio del barril de petróleo está en ascenso, sí es malo. El sistema de liberación de combustibles en Chile de hecho todas las semanas ajusta sus valores dependiendo de la reacción del petróleo en el mundo. Recordá que Chile no tiene petróleo, entonces toda la vida ellos han estado regidos por valores internacionales. La diferencia puede estar en la composición tributaria del producto.
Pero sí es verdad que el agobio lo siente la gente en la calle todos los días. Mi mayor deseo es que ya esté terminando este proceso de ajuste para lograr una estabilidad; incluso este gobierno el mayor flagelo que tiene es poder combatir la inflación. (que) sigue siendo la cuenta pendiente que no se logra de la noche a la mañana. Se necesita una política de Estado, que debe preceder a los gobiernos independientemente de la ideología política y partidaria. Pero sí está claro que hay temas estructurales de base que en dos o tres años no se pueden arreglar; la inflación es uno de ellos.
-Tu empresa es exportadora en la agroindustria, la competitividad, ¿sólo se soluciona con el tipo de cambio?
-No, seguro que no, pero es un factor que te ayuda porque vos podés tener el mejor tipo de cambio que más te convenga, pero si no sos eficiente produciendo ni tenés tecnología ni estás acorde a lo que el mundo requiere, no vas a ser competitivo. Obviamente, todos los factores inciden, pero el empresario debe ser una persona eficiente y competitiva al momento de producir. Luego, si el tipo de cambio puede incidir claro que sí, también ayuda la parte tributaria. Es un conjunto factores, pero todos tienen que poner su aporte. El otro aspecto es que hay que tratar de exportar con mayor valor agregado, porque eso es lo mejor que le puede pasar a la sociedad.
-Vos también estás vinculado al tema vitícola en tu empresa y tu empresa está afincada en el Este, ¿cómo se puede ser competitivo con uvas que el mercado no demanda?
-Está claro que hay que reconvertirse y que hay que tecnificar. Obviamente el productor pequeño, que es el que mayor volumen posee, es el que tiene menos posibilidades económicas de acceder a tecnología como riego por goteo. El otro enorme desafío que tenemos como provincia y como país es tratar de escaparnos de lo coyuntural para poder mirar hacia adelante y así vislumbrar el futuro que se nos viene. La zona Este, en volumen, es la principal productora de la provincia y tiene un desafío muy grande.
-¿Cómo cuál?
-Plantearse si en San Martín solamente tiene que vivir de la vitivinicultura o tratar de desarrollar otras actividades en la zona para poder generar esa mano de obra de valor agregado. Creo que son preguntas que debemos hacernos para saber cómo nos vamos a proyectar de acá a 20 años. Es difícil pero es lo que hay que hacer.
Perfil - Javier Allub (42)
Además de ser el actual presidente del Consejo Empresario Mendocino (CEM), dirige junto a otros miembros de su familia la firma Allub Hermanos. Comenzó a trabajar en el año 2000 y en un momento de transición cuando en la compañía ya convivían la segunda y la tercera generación.
“Aprendí mucho los manejos de la empresa y la importancia del trato profesional para poder progresar y avanzar”. En la actualidad es gerente comercial de tres sectores.
Practicaba moto enduro, actividad que fue dejada de lado debido a sus compromisos con su familia. “Sí me gusta ir al gimnasio y hacer bicicleta. Soy como todas las personas y con los años he aprendido a dividir mi vida entre responsabilidades y disfrute”, apuntó el empresario.