Jardín Agrelo: hogar de familias que se mudaron al sur de Luján

La zona se caracteriza por su casco antiguo, donde están la escuela Espejo y la comisaría, y esta parte, que nació hace 14 años.

Jardín Agrelo: hogar de familias que se mudaron al sur de Luján
Jardín Agrelo: hogar de familias que se mudaron al sur de Luján

En la década pasada, el distrito Agrelo aumentó considerablemente su población al levantar el Instituto Provincial de la Vivienda nuevos barrios en el sur lujanino.

Es el caso del barrio Jardín Agrelo, que se construyó por etapas, y que hoy se caracteriza por 250 casas y un centro integrador comunitario (CIC), que es el núcleo central de esa gran barriada. Los habitantes, según fuentes municipales, suman 1.300, con un importante aporte de niños y adolescentes. Los adjudicatarios tienen distinta procedencia. Algunos vinieron del Bajo de Luján, otros de diferentes puntos del Gran Mendoza, y, por supuesto, otros son originarios del distrito.

Este conglomerado habitacional se ubica frente al kilómetro 28 de la ruta provincial 15, no muy lejos del casco antiguo del distrito. Allí también se ubican el antiguo barrio Octavio Ghilardi, el centro de salud local y el pozo potabilizador que provee de agua a la zona, que ahora funciona mejor tras arreglos que efectuaron el municipio de Luján y las bodegas cercanas.

Para dialogar sobre el barrio y su proyección se reunieron con Los Andes varias damas de la vecindad: María Valverde (77, antigua vecina); su nieta, Celeste Liberatto (21, reina vendimial del distrito; Erica Panne (42, bibliotecaria) y Analía Alessandrello (33).

Del relato de las vecinas surge que lo primero que se puso en pie fueron las casas que encaró la cooperativa Valle de Perdriel. Con ellas nació el primer sector del Jardín Agrelo. Este hito data de 2006.

Le siguió un año después el emprendimiento realizado por la cooperativa Xumec, con 40 unidades habitacionales. Esta parte correspondió a la erradicación del Bajo de Luján del barrio San Martín Sur.

La última ejecución de hogares también estuvo a cargo de la Cooperativa Valle de Perdriel. Estos  inmuebles pasaron a manos de sus dueños hace unos 8 meses. Las viviendas en general eran  pequeñas, 50 m2 cubiertos, pero los adjudicatarios agregaron ambientes. Paralelamente a las ejecuciones de las casas, en 2008 se hizo el centro integrador comunitario (CIC).

Este complejo es el núcleo de la vida comunitaria lugareña, al punto que sin sus servicios poco se podría hacer en el lugar.

Allí se realizan muy variadas actividades para las diferentes edades. Entre otras cosas es sede de la biblioteca popular Norma Acordinaro, del taller musical que conduce el profesor Carlos Corvalán y de centros de capacitación que impulsa la DGE.

La agrupación de músicos noveles es un ejemplo estimulante, que concentra mucho interés. Uno de los pequeños ejecutantes, Xavier Graneros (12), dedicado a la percusión, cuenta que la disciplina musical lo entusiasma mucho y está en sus planes seguir "batiendo el parche". Además, el CIC cobija a una escuela de chicos con discapacidad y un jardín infantil, "Solcito soñador".

La antigua vecina María Valverde refiere su experiencia: "Vivo por aquí desde los 18 años. Los barrios han dado otro aspecto al pueblo, antes el sitio que ocuparon las casas eran viñas y chacras y con la llegada de  las casas se sumaron servicios, como el agua".

La expectativa en mejoras pasa por la próxima ejecución del sistema cloacal para el distrito agrelino y Perdriel. Se acaba de realizar una audiencia pública y resta en estos momentos esperar esperar la resolución final de la Unidad de Evaluaciones Ambientales que deberá declarar la aprobación del impacto ambiental del proyecto.

La obra costará $ 28.600.000 y cubrirá las necesidades de 12.000 personas. La planta de tratamiento de efluentes cloacales se ubicará en un terreno ubicado al sudoeste de la intersección de las rutas nacionales 7 y 40.

Las calles del barrio son de tierra; su pavimentación es otra expectativa del vecindario. Sin embargo, es opinión generalizada que primero deberán instalarse las cloacas para asfaltar después.

En materia de transporte público, los pobladores están abastecidos por las unidades de la línea 850 Bartolomé Mitre y Cata  (larga distancia). No se quejan del todo, pero no les desagradaría la incorporación de algunas mejoras.

En materia de educación, la población infantil asiste a las escuelas Gerónimo Espejo y Juan Bautista Azopardo, con su flamante local inaugurado en 2013. El nivel secundario lo ofrece el colegio 4-172 Puerto Argentino, asentado en el barrio Valle de Agrelo II).La vecina Analía Alessandrello, resumió: "Esta zona es muy linda,  y en cierto modo más tranquila que  otros lugares del departamento". La empleada de la biblioteca Acordinaro, Erica Panne, opina que el distrito tiene espacios naturales muy especiales, "que enseñan a los chicos a revalorizar el entorno, la naturaleza y la fauna nativa".

Una ex moradora del pintoresco barrio Jardín Agrelo, Graciela Squizzatto (48), señala que por razones particulares se tuvo que ir a residir al centro de Luján de Cuyo. "Sufrí alejarme de Agrelo; hay muchos recuerdos de los años en que jugábamos en los potreros que ahora ocupan las casas. Éstas son un progreso, pero aquellos sitios del pasado, el tiempo feliz de la infancia”.

El antiguo nombre era Las Colonias

La historiadora autodidacta Norma Acordinaro escribió que el distrito antiguamente se llamó Las Colonias, denominación que aún figura en los itinerarios de los medios de transporte.

Una característica de la zona que ella conoció bien porque nació en esta parte de Luján hace 75 años, era la existencia de viñedos, chacras, potreros, y montes frutales (cerezas, peras y manzanas). Este último cultivo era posible por ser un paraje muy frío, con condiciones similares al Valle de Uco.

A la investigadora citada le parece bien que se hayan construido viviendas en el área, pero a su juicio no se interpretó adecuadamente la calidad de los suelos para el desarrollo de uvas de calidad y el hecho de que no hubiera industrias para absorber a los habitantes que se radicaban.

Hoy las fuentes laborales principales son las fincas y bodegas (de hecho Chandon absorbe bastante mano de obra) y en el empleo en el Estado, principalmente en la Municipalidad de Luján.

El trabajo por la contención de los más chicos

Uno de los vecinos del Jardín Agrelo es Roberto Flores (44),  hombre importante en el barrio San Martín Sur, que estaba en el Bajo, y ya está radicado en el distrito.

Flores sigue promoviendo la contención de los menores, especialmente los adolescentes y pone energía  en una de las escuelas de fútbol de la región, bautizada con el nombre de Jardín de Agrelo.

También ha creado con amigos la murga "Batuca de Jardín", que está recibiendo en general a muchachos mayores de 15 años. En estos menesteres reconoce el apoyo del ejecutivo del sector vitivinícola Ángel Vespa.

Roberto nos dio su idea de qué significa vivir en la zona. "Lo bueno es que los vecinos seguimos en comunidad y con ganas de progresar", aseguran chicos y adultos.

Tenemos algo para ofrecerte

Con tu suscripción navegás sin límites, accedés a contenidos exclusivos y mucho más. ¡También podés sumar Los Andes Pass para ahorrar en cientos de comercios!

VER PROMOS DE SUSCRIPCIÓN

COMPARTIR NOTA