Una parte de la historia alrededor de Mario Echeverría (74), el vecino de Jaime Prats que fue diagnosticado con coronavirus y falleció el miércoles 15, finalmente terminó. Las personas que fueron confinadas para contener una posible expansión del virus en el distrito de San Rafael recuperaron su rutina ayer.
Los test para detectar Covid-19 que arrojaron resultado negativo entre los familiares directos de Echeverría y la falta de síntomas en el resto de los vecinos aislados, fueron motivos suficientes para dar por terminado el procedimiento.
"Ya nos vinieron a ver y nos dijeron que podemos salir a hacer trámites o hacer las compras, siempre de a uno, pero ahora podemos salir", contó María, la viuda de Echeverría.
Cuando confirmaron que el hombre de 74 años dio positivo para Covid-19, se desató una histeria masiva en Jaime Prats y una oleada de comentarios en las redes sociales tuvo como blanco a los parientes directos del difunto. Los acusaban de llevar el virus hasta el distrito distante a 75 kilómetros de San Rafael ciudad.
Ese maltrato es algo que está fresco en la mente de María y el resto de los integrantes de la familia y las heridas están lejos de sanar. "Nos han tratado muy mal, nos ofendieron mucho. Se han dicho muchas mentiras por ese maldito Facebook, de mi hijo, de nosotros", contó María, que dejó a flor de piel esa molestia que le causaron los comentarios en las redes sociales.
Daniel Pérez (43) es el hermano de María. Él viajó desde Fortuna, San Luis, el 1 de marzo y se instaló en Jaime Prats para la cosecha de la uva. Luego se encontró con la pandemia, la cuarentena y todo lo que giró en torno a su cuñado.
"En los grupos (de WhatsApp), en las redes sociales, nos han tratado como si fuera culpa nuestra esto que pasó; como si fuéramos delincuentes", expresó Daniel.
“Yo decía que se iban a morder la lengua porque sabíamos todos que estábamos sanos y ahora está a la vista. Pero nos trataron muy mal y la pasamos muy mal con todo lo que dijeron”, agregó el obrero rural.
Coronavirus o cáncer
¿Cómo pudo contraer el virus una persona que padecía un feroz cáncer de pulmón y prácticamente era imposible que saliera de la casa? Es una pregunta que está tan vigente como la pandemia misma y tal vez nunca tenga una respuesta satisfactoria.
La falta de una conexión epidemiológica hace que la versión de la familia de Mario Echeverría cobre mayor fuerza.
María Dávila, la viuda, volvió a repetir que "él murió de su enfermedad, no de ese virus. Si tomábamos mates juntos, entonces ¿cómo no me contagié yo?", analizó.
"Para mí se equivocaron; yo no culpo a nadie porque en la vida todos nos equivocamos. Pero él estaba muy mal por el cáncer y no tenía contacto con nadie, no se pudo contagiar. Creo que se equivocaron con él", insistió Daniel Pérez, cuñado de Echeverría.
La teoría de Carina, la hija del hombre fallecido, es la misma. Por eso sostiene que no va a descansar "hasta que se sepa la verdad". "Quiero saber qué pasó con mi viejo; él no estaba contagiado (de coronavirus)", aseguró en diálogo con Los Andes.