El bullicio de Roma se redujo a un susurro, y los patrullajes de la policía mantenían a la gente separada en los cafés mientras Italia implementaba ayer un extraordinario y amplio aislamiento con la esperanza de no ser el próximo epicentro de la epidemia de coronavirus ahora que la vida en China regresa lentamente a la normalidad.
Las infecciones en Italia alcanzaron los 10.149 casos -más que cualquier otro lugar además de China-, y el número de muertes por el virus subió en un día de 463 a 631, informaron autoridades de Protección Civil de Italia.
Las restricciones de viaje y sociales que se extendían por toda Italia ilustran cómo el virus y las alteraciones que provoca se mueven hacia el occidente desde China, en donde comenzó el brote.
Equipos de policías patrullaban cafés para asegurarse de que los propietarios mantuvieran a sus clientes a 1 metro de distancia entre ellos durante el día y luego vigilaran el cumplimiento de la orden de cerrar a las 6 de la tarde.
En muchas personas, el nuevo coronavirus sólo provoca síntomas moderados, como fiebre y tos. En algunos, en particular adultos mayores y personas con problemas de salud ya existentes, puede causar enfermedades más graves, como neumonía. Más de 116.000 personas se han infectado a nivel mundial y más de 4.000 han muerto.
Según la Organización Mundial de la Salud, las personas con síntomas leves se recuperan en alrededor de dos semanas, mientras que quienes presentan un cuadro más grave podrían tardar de tres a seis semanas en recuperarse. En China continental, casi tres cuartas partes de las 80.000 personas que han sido diagnosticadas se ha recuperado desde diciembre.
Al motivar a muchos de los 62 millones de habitantes de Italia a quedarse en casa y afectar todavía más la ya golpeada industria turística del país, el aislamiento podría aumentar la probabilidad de una recesión en la península.
La economía de Italia, la tercera más grande de los 19 países que utilizan el euro, es particularmente dependiente de sectores que requieren presencia física y proximidad de trabajadores: turismo, manufactura y ventas minoristas.
En una lista de instrucciones titulada: "Me quedo en casa'', la oficina del primer ministro dijo que los italianos no deberían salir de casa a menos que fuera para trabajar, recibir atención médica o ir al supermercado. También dijo que tiendas, cafés y restaurantes deberían cerrar a las 6 de la tarde, restricción radical en un país que valora su cultura gastronómica, de lujos y cafés.
Malta y España anunciaron que prohibirían los vuelos de Italia. Malta regresó otro crucero y British Airways canceló todos los vuelos a Italia. Austria prohibió que viajantes cruzaran la frontera sin certificado médico, Eslovenia cerró su frontera con Italia y Albania prohibió tráfico aéreo y de transbordadores a Italia. Gran Bretaña, Irlanda, Hong Kong y Alemania exhortaron a sus ciudadanos a salir de Italia. Incluso el Vaticano erigió una nueva barrera en la orilla de la plaza de San Pedro.
Pero en China, ante la menguante amenaza, el presidente Xi Jinping visitó el epicentro de su brote el martes y declaró: "Definitivamente derrotaremos a esta epidemia''.
La visita de Xi a la ciudad de Wuhan, la primera que hace desde que estalló el brote, es la señal más reciente de que China está retornando a la normalidad.
Fondo de 25.000 millones de euros por la crisis
La Unión Europea (UE) pondrá en marcha un fondo de 25.000 millones de euros para hacer frente al brote de coronavirus Covid-19, anunció hoy la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen. La funcionaria habló en una rueda de prensa posterior a la cumbre que mantuvieron los líderes del bloque por videoconferencia.
La jefa del Ejecutivo comunitario detalló que lanzará en breve una propuesta para liberar 7.500 millones de euros de este fondo con cargo al presupuesto de la UE, que se utilizará para apoyar a los sistemas sanitarios de los estados miembro, ayudar a las pymes más afectadas o actuar en el marcado laboral y asistir a los sectores más vulnerables.
"Es el momento de actuar", subrayó Von der Leyen en larueda de prensa tras la cumbre, en la que también participaron la presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde; y el presidente del Eurogrupo, Mario Centeno.
Además de la activación de este fondo de inversiones, la presidenta de la Comisión Europea anunció, en lo económico, medidas para garantizar que los países puedan dirigir ayudas públicas a las empresas que tenga problemas de liquidez y “toda la flexibilidad” que contemplan las normas fiscales europeas.
Bruselas también se comprometió a multiplicar los esfuerzos para la investigación de una vacuna y de sistemas de diagnóstico y tratamiento del coronavirus, que complementen los 140 millones de euros públicos y privados que habían sido anunciados en esta materia.
Europa registra 511 muertes desde que comenzó el brote de coronavirus en el continente, donde Italia es el país más afectado, con más de 600 muertes. Francia tiene 21 decesos, España 16, Gran Bretaña 4, Holanda 3 y Suiza y Alemania 2 cada uno.