i los Estados Unidos fueron azotados por el huracán Sandy, Italia fue golpeada por el “ciclón Grillo”. En las elecciones regionales que se celebraron en Sicilia hace una semana, consideradas un test con vistas a las elecciones nacionales que tendrán lugar en abril próximo, el Movimiento Cinco Estrellas (M5E), del cómico y bloguero genovés Beppe Grillo, se convirtió en la primera fuerza política de la isla.
En medio de la debacle del Partido del Pueblo de la Libertad, de Berlusconi, que antes tenía en Sicilia uno de sus feudos electorales, y de una abstención récord -que rozó el 53%-, el M5E de Grillo, el “rey de la antipolítica”, que hizo de la crítica descarnada a los políticos su principal seña de identidad, cosechó un triunfal 18 por ciento.
El boom de Grillo, que ya en las elecciones municipales de mayo pasado había arrasado, desató el pánico en los palacios del poder romanos. En las elecciones de abril próximo -cuando el gobierno técnico de Mario Monti deberá dejar las riendas de una Italia aún en plena recesión-, el M5E podría obtener un 20% de los votos. Ya se habla de la llegada de 120 diputados “grillini” en el Parlamento y los partidos políticos analizan medidas para contrarrestar a los “bárbaros” de Grillo.
Pero si éste se ha convertido en el fenómeno del momento se debe al rechazo total de la gente de la calle hacia los partidos políticos tradicionales. Lejos de resolver los problemas a los italianos, la “casta” política se encuentra hoy desacreditada no sólo por sus privilegios y sueldos siderales en una Italia cada vez más empobrecida -cosas que desde hace años, sin piedad, denuncia Grillo-, sino por una oleada de escándalos de corrupción que no ha perdonado a nadie.
Hubo vergonzosos casos de malversación de dinero público en regiones importantes como Lombardía y Lazio -gobernadas por el partido del ex premier Silvio Berlusconi, hoy caído en desgracia en medio de condenas judiciales y fiestas bunga-bunga-, en el seno de la Liga Norte, del Partido Democrático y hasta de la Italia de los Valores del ex juez anticorrupción Antonio Di Pietro. Estos escándalos no han hecho más que llevar agua al molino de Beppe Grillo.
Un showman que, en lo que muchos analistas llaman una nueva Tangentópolis -a 20 años de la verdadera Tangentópolis, el escándalo por el financiamiento ilegal de los partidos políticos que certificó la muerte de la Democracia Cristiana-, se levanta como el adalid de un nuevo modo de hacer política, a través de la redes sociales, de campañas electorales que cuestan un décimo de las de los grandes partidos, y de transparencia.
Genovés, de 64 años, actor y cómico satírico de verba corrosiva y autor de uno de los blogs más leídos a nivel mundial, Grillo logró en los últimos años aglutinar a los “indignados” por la mala política reinante en Italia. Pudo juntar a los que ya no les creen a los políticos, a los que están hartos y a los que se identifican con el famoso “que se vayan todos” argentino, en un movimiento que se niega a llamar “partido” (eso es mala palabra), criticado tanto por los políticos como por el establishment, que lo tildan de populista sobre todo por su rechazo al euro.
“Nos vemos en el Parlamento y va a ser un placer”, tuiteó el martes pasado el humorista -personaje amado u odiado en Italia- que festejaba el boom de su movimiento en Sicilia. Este no habría sido posible si no hubiera protagonizado él mismo una campaña electoral basada en sus shows-monólogos en contra de los partidos políticos italianos, de derecha e izquierda, contra las instituciones y contra los medios, en diversas ciudades de Sicilia. La campaña arrancó en forma clamorosa, con el cómico que cruzó nadando el estrecho de Messina, toda una hazaña que muchos compararon a las que solía hacer el Duce... Y siguió con Grillo llegando al trote, al mejor estilo Forrest Gump, a diversas citas electorales.
“Grillo fue fantástico. Si a los 64 años podés cruzar nadando el estrecho de Messina quiere decir que podés hacer cualquier cosa. Es justamente ése el mensaje de esperanza que trajo a Sicilia”, comentó Giancarlo Cancelleri, el candidato del M5E en Sicilia. El M5E -que rechaza los reembolsos electorales que reciben los partidos políticos, redujo en un 80% los exorbitantes sueldos que suelen tener los políticos y prohibió el ingreso en sus listas de personas con antecedentes penales-, hoy tiene consejeros municipales en 132 comunas y está presente en ciudades como Milán, Génova y Bologna, y en los consejos regionales de Emilia Romagna, Sicilia y Piamonte.
El M5E tiene su origen en 2000, cuando Grillo abrió su blog www.beppegrillo.it, a través del cual comenzó a despotricar contra todos los males endémicos de la clase política italiana. Aunque el M5E nació en verdad años más tarde, en 2009, a la luz del fenomenal éxito de las jornadas de protesta organizadas por Grillo en contra del sistema político, sugestivamente bautizadas “V-day” (por vaffanculo, clásico insulto italiano).
“Ahora estamos incidiendo por el trabajo hecho en los últimos años, pero también porque desaparecieron los partidos políticos, que están muertos, y por la situación económica que no le da esperanza a ninguno de estos partidos, porque son los que la han creado. Los partidos se han pulverizado en una diarrea líquida política y no quedó nada. Es decir, nosotros somos la salvación, porque a diferencia de un movimiento extremista, como los hay en el resto de Europa, el M5E es un movimiento de paz, de personas de bien”, dijo Grillo en una entrevista en mayo pasado, en la que aseguró que el M5E es el reflejo de una “hiperdemocracia” nunca antes vista en Italia.
Gran comunicador e hipnotizador de masas, Grillo no aparece desde hace años en ningún canal de televisión: fue exiliado de la pantalla chica cuando comenzó a denunciar la corrupción de los denominados “poderes fuertes italianos”. Tiene una pésima relación con los medios, que lo acusan de ser antidemocrático y autoritario. Como “jefe político” del M5E, con el cual asegura no querer presentarse como candidato a ningún cargo, y en su rol de “garante, para controlar y ver quién entra”, ya se ha peleado con varios de sus miembros. ¿Por qué? Porque algunos se han atrevido a desobedecer su taxativa orden de no aparecer en talk shows televisivos. “¡No vayan, ése es vuestro punto G!”, clamó, enfurecido, en su blog, hace unos días, después de que una joven consejera comunal de Bologna apareció en Ballaró, un programa político de RAI3.
Tiembla el poder
Grillo, un cómico que, mal que le pese, como “rey de la antipolítica” se ha vuelto un hombre político, suele decir que el M5E no es ni de derecha, ni de centro, ni de izquierda. “Nosotros hemos ido más allá y estamos ‘sobre’ los programas: cómo hacer una casa, cómo hacer las infraestructuras, cómo convertirnos en Estado, que los políticos sólo puedan ser elegidos dos veces en una legislatura y después, a casa”. Ante su avance, irreversible en el desierto político italiano, los palacios del poder romano tiemblan.
