Por las altas temperaturas lógicas del verano, cientos de mendocinos buscan refrescarse en diferentes cauces de agua de la provincia que, ya es sabido, no son aptos para tal uso de esparcimiento. Es por eso que desde el Departamento General de Irrigación lanzaron una nueva versión de la campaña "Verano #SinMuertosDeCalor". Se trata de una iniciativa con la cual, desde 2018, se viene buscando generar conciencia sobre lo que puede sucederle a quienes se sumergen en cauces de riego, canales, diques y embalses que no son aptos para bañarse.
Irrigación explica, a través de videos en Youtube que ya pueden verse también en los medios de comunicación, que bañarse en lugares no habilitados para tal fin puede provocar la muerte y, también, grandes deterioros en la red hídrica de Mendoza. Cabe recordar que bañarse en cauces de riego está prohibido e, incluso, existen normativas que lo penan.
Esta nueva versión de la campaña "Verano #SinMuertosDeCalor" está otra vez apoyada en la frase que habitualmente se usa para referirse al calor y que muchas veces se repite sin darle la importancia necesaria a su significado real. "Estoy muerto de calor", es habitual escuchar entre los mendocinos. En las escenas del spot se puede ver a un grupo de amigos cercanos a un dique y el momento en que uno de ellos decide saltar al agua. Las estadísticas de los últimos cinco años aportadas por Defensa Civil de la Provincia indican que, en promedio, unas 57 personas perdieron su vida en cauces y ríos de nuestro suelo. En la mayoría de los casos, se trató de jóvenes y niños.
Los riesgos de tirarse
Para tomar mayor conciencia del peligro que puede significar recurrir a estos espacios de agua para aliviar el calor, hay que saber que en canales y diques hay rocas que nos pueden lastimar y sistemas de compuertas que succionan el agua y pueden provocar la muerte instantánea. La baja temperatura del agua puede ocasionar también un shock térmico y la propia corriente, según la traza y pendiente del canal, inevitablemente arrastran y sumergen al bañista. Mendoza cuenta con 38 diques y más de 12 mil kilómetros de canales (5.000 km en la cuenca del río Mendoza entre primarios, secundarios y terciarios), de los cuales un porcentaje importante se encuentra en propiedades privadas (fincas), por lo que se hace necesario que la ciudadanía en general tome conciencia de los riesgos que implica bañarse en los cauces, ya que en la mayoría de los casos es imposible contar con la ayuda y auxilio inmediato.
Una Ley pena el uso indebido de cauces
El Senado y la Cámara de Diputados de Mendoza sancionaron, en mayo de 2015, la ley 8.784, que establece que se incluya en el Código de Faltas, Ley N° 3365, en el Título VI "Faltas Contra la Seguridad Pública" el artículo 84 bis “Uso indebido de cauces de agua”, a partir del cual se establece que sea sancionado con trabajos comunitarios el que utilice para bañarse los canales de riego, represas, diques derivadores, tomas y cualquier obra hidráulica de la Provincia; el que arroje sobre los cauces tacos, maderas, piedras o cualquier otro elemento que obstaculice el normal escurrimiento de las aguas por la red de riego de la Provincia, y el que deteriore por cualquier tipo de actividad los cauces, las obras de toma, los taludes de los canales, las compuertas o cualquier obra hidráulica de conducción del agua. En tanto, la Resolución Nº 160 de 1993 de la Superintendencia de Irrigación prohíbe la utilización de ríos y cauces naturales o artificiales para la realización de actividades balnearias o esparcimiento. A partir de la misma se lleva adelante la campaña de concientización este año. A cuidarse y prevenir.