El Índice de Precios al Consumidor (IPC) de agosto llegó al 2,61% y por segundo mes consecutivo la variación fue hacia arriba ya que en julio marcó 2,48%, según indica un informe elaborado por la consultora Evaluecon, que mide precios en Mendoza a falta de estadísticas oficiales. De este modo, en ocho meses, el IPC acumulado llegó al 24,69%, el mismo porcentaje de inflación que se registró para todo 2012 según la medición de Evaluecon (en 2013, esa cifra fue de 29%).
En el informe se señala que lo que más subió fueron los servicios con un incremento del 32% en el último mes, influenciado por el aumento de las facturas de gas que llegaron con subas de hasta el 40%.
El ranking de precios también lo componen los combustibles y lubricantes (21%) y alimentos y bebidas (14%) empujados por las variaciones de lácteos, verduras y carnes. En el mes del Día del Niño, los juguetes y artículos de tecnología también tuvieron incrementos importantes.
El alza que tuvo el IPC en agosto en comparación con julio causa sorpresa ya que el último suele ser un mes de subas estacionales empujadas por las temperaturas frías y las vacaciones. “Lo que notamos en este mes es un incremento fuerte en las verduras, que tiene algún componente estacional; en los combustibles; en celulares, electrónicos y audio por el Día del Niño porque ahora se regalan más estos productos que los juguetes”, detalló José Vargas, economista y director de la consultora.
El especialista también explicó que el aumento de la carne en la última semana y media se empieza a notar por un traslado de precios por la suba del dólar y es probable que el impacto “real” en este rubro se vea en setiembre.
Perspectivas en alza
Así como en 8 meses el IPC ya subió lo mismo que en todo un año, la cuenta actual anualizada es que en los últimos doce meses los precios de la Canasta Básica Total se incrementaron 34%. “Si proyectamos estas cifras para 2014, podemos decir que cerraremos entre un 40% y un 45%”.
El economista también explicó que el actual ha sido un año atípico en materia inflacionaria debido a que comenzó muy arriba por los efectos postdevaluatorios y luego bajó pero después de junio (el punto más bajo hasta el momento) debido a que la economía entró en recesión. Luego se observó un repunte en los valores, en gran parte influenciado por las variaciones verificadas en servicios públicos (en especial agua y gas), combustibles y productos dependientes de importación, que están sujetos a los incrementos del tipo de cambio.
Precios descuidados
Las mediciones del Indec y las declaraciones de funcionarios nacionales muestran cierto enfriamiento en el IPC influenciado principalmente por el programa de Precios Cuidados. Los especialistas recuerdan que no sólo se ha permitido un incremento de los mismos en el último mes sino que también se han agravado los faltantes en las góndolas.
“Los precios cuidados se respetan un 25% y quizás hasta junio había publicidad en las góndolas. Desde julio esas promociones no están y la lista no se encuentra en los locales”, expresó Vargas, quien agregó que son cada vez menos los cartelitos que referencian el programa y es común que no estén claros los faltantes en donde el azúcar, la harina y el aceite siguen siendo las figuritas repetidas.
El economista explicó que esta situación se debe a que, en medio de controles, cupos y contexto inflacionario, las empresas no siempre pueden o alcanzan a reponer en tiempo y forma los productos.
Desde Prodelco, Defensa al Consumidor, Susana Yelich recordó el reciente aumento otorgado a estos productos y coincidió con Vargas en que los faltantes son cada vez más comunes por lo que encontrar productos pertenecientes al programa Precios Cuidados es una “cuestión de suerte”.
Según su visión, los consumidores terminan comprando lo que hay debido a que, en general, no tienen tiempo para recorrer diferentes sucursales.
