Interesante iniciativa para el turismo

La incorporación de las "rutas gastronómicas" constituye una iniciativa interesante para ampliar la oferta turística mendocina. Mendoza alcanzó trascendencia en los últimos años en el turismo y cuenta con regionalismos, inclusive en sus comidas, que son un aliciente más para quien visita la provincia.

El turismo gastronómico gana prestigio a nivel internacional. Podríamos señalar como ejemplo la comida "gourmet" que impuso Francia y que obligó a países de la región a intentar imponer sus ofertas, como sucedió con la comida "mediterránea" ofrecida por los españoles.
 
En todos los casos se trata de complementos importantes para la captación de turistas, ya que quien visita un determinado lugar se ve atraído también por sus comidas típicas.

La Argentina no escapa a esa tendencia. Es lo que sucede en Bariloche con sus truchas o ciervo ahumado, las famosas empanadas salteñas, los platos en base a pescado en la zona del Litoral o el cordero patagónico en el Sur del país.

Mendoza tiene mucho para ofrecer en el plano de la gastronomía. Años atrás, una importante bodega de Maipú invitó a famosos chef de distintas zonas del país para que ofrecieran los platos típicos de su región, a los efectos de buscar la mejor combinación -o maridaje- con los vinos.

Al finalizar la reunión, los propios especialistas en cocina procedieron a elegir el mejor plato y en la compulsa ganó un tomaticán elaborado por el representante mendocino.
 
El motivo de la elección fue unánime: el sabor del tomate mendocino, cortado en su punto ideal de madurez, supera al que se consume en el resto del país. Otro tanto podría decirse con la inversión realizada por un empresario español que cuenta con una bodega en Luján quien incorporará un restaurante en el que se servirán sólo comidas mendocinas.
 
"La gente que viene desde el exterior quiere comer lo que aquí se cocina. Para comer comida gourmet tiene distintos lugares del mundo", señaló ante una consulta el empresario.  

La iniciativa, surgida desde el plano oficial para posicionar a Mendoza desde otra perspectiva y poner en valor los emprendimientos instalados cuyas propuestas culinarias tienen fuerte raigambre local, ha sido muy bien recepcionada por el sector privado.

Desde allí se reconoció que la provincia, hasta el momento, es poco conocida a pesar de contar con una gran oferta culinaria; agregando que constituye el complemento ideal para el turismo enológico en razón de que se trata de combinar la comida con el vino.

Otro de los aspectos interesantes radica en que la ruta gastronómica abrirá también el camino para otra actividad importante de la provincia, como es la olivícola. Nuestra provincia cuenta con el mejor aceite de oliva que se produce en el país.

Por razones climáticas -gran amplitud térmica entre el día y la noche- el aceite de oliva que se elabora en Mendoza alcanza niveles de calidad internacional; aspecto que llevó, en su momento, a que en la Legislatura provincial se sancionada una ley de denominación de origen, a los efectos de identificar nuestro producto con el que surge en el resto del país.

Calidad que se observa también en las aceitunas, consideradas en un primerísimo nivel para los principales chef del país y ratificada por la elección que surge, para las aceitunas mendocinas, de parte de los países importadores.

Hasta no hace mucho, Mendoza sólo era conocida por sus bellezas naturales y el polo turístico se había fortalecido en el Sur provincial.
 
Sin embargo, en la última década el turismo enológico tuvo un crecimiento exponencial, como consecuencia de la incorporación de los restaurantes por parte de las bodegas. La ruta gastronómica y la incorporación de la cocina regional amplía la oferta turística para los miles de turistas que habitualmente llegan a la provincia.