Por la mente de los empresarios y melómanos Isaac Tigrett y Peter Morton ni remotamente podía pasar aquel lejano día de 1971 en el que inauguraron su primer local junto al Hyde Park londinense: que lo que, como fanáticos de la música, bautizaron Hard Rock Café, se convertiría con el tiempo en una megacadena de gastronomía temática, y mucho menos que festejaría su cumpleaños número 42 en una remota ciudad de Sudamérica llamada Mendoza.
Según los planes de la marca en el país, pronto será realidad: Palmares es el lugar elegido para abrir, antes de terminar 2013, el segundo restaurante argentino de la marca identificada con la cultura rockera.
Los propietarios de la franquicia Hard Rock en el país ya iniciaron las primeras conversaciones con los dueños del centro comercial de Godoy Cruz. Los establecimientos a nivel mundial tienen como sello la decoración, compuesta por objetos de culto e indumentaria del rock.
A diferencia de la estrategia de posicionamiento masivo de otras cadenas caracterizada por la apertura de múltiples sucursales en distintos puntos del país, la de Hard Rock es claramente más selectiva.
De ahí que, tras la decisión de hacer pie en Mendoza, desde la compañía en Buenos Aires intentan bajar el tono a los avances del proyecto que lo convertirá en el primer local fuera de la Capital. "Por el momento no tenemos ninguna información para dar al respecto. Apenas haya novedades las daremos a conocer", se limitó a señalar Gerard Stofmajer, operations manager de la licencia en el país.
En busca de estímulos
La reserva de Stofmajer respecto de montos y plazos se debe, en buena parte, a que la celeridad en la ejecución del futuro Hard Rock mendocino es directamente proporcional a las condiciones que faciliten la inversión.
De hecho, responsables de Hope Founds, el fondo de inversión que explota la licencia en Argentina, ya mantuvieron reuniones con los ministros de Turismo, Javier Espina; de Agroindustria, Marcelo Barg, y funcionarios de la Agencia de Atracción de Inversiones, para pulir un esquema financiero acorde a sus planes.
Uno de los socios del grupo, Juan Fabbri, se llevó información como parte de un estudio de mercado proporcionado por la cartera turística sobre el flujo de visitantes que registra actualmente Mendoza y que, de acuerdo a Espina, ayudó a la decisión.
"La dinámica turística de la provincia ya justifica una inversión de este tipo que, según nos anticiparon, prevé arrancar no más allá del segundo semestre. Para eso le hemos ofrecido todo nuestro apoyo", señaló el funcionario.
Además de acceso al crédito, el programa Iniciar es otra herramienta que la franquicia quiere aprovechar para solventar la generación de los puestos de trabajo que requerirá echar a andar.
Puesto en marcha en agosto del año pasado, la iniciativa del Ejecutivo local promueve la inserción laboral de jóvenes de 18 a 25 años, para lo cual solventa $ 1.000 de cada salario durante los primeros 12 meses del vínculo contractual.
Por su parte, el gerente general de Palmares Open Mall, Federico Migliavacca, confirmó la negociación con Hope Founds aunque dejó supeditado el tiempo de ejecución a las definiciones que surjan con la Provincia. "Lo cierto es que existe un interés real, una intención clara de llegar a Mendoza y de hacerlo en Palmares, puntualmente", subrayó el ejecutivo.
"Tal vez no en los próximos días, pero pronto debería haber definiciones para empezar a pensar en el primer Hard Rock del interior del país", resumió con optimismo Migliavacca.
Según trascendió, hace un año Hope Founds pagó U$S 5 millones para quedarse con la licencia de Hard Rock en Argentina. Ahora dicen que entre sus propósitos estaría el de que el formato se vuelva más "argentino". Es decir, con una importante presencia de los líderes del rock nacional.
Cabe destacar que Hope Founds también controla en Mendoza el emprendimiento vitivinícola Santa María de los Andes, del cual participa el conductor y empresario televisivo Marcelo Tinelli.