Los autos estacionados sobre la vereda suelen causar enojo en los peatones, sobre todo cuando tienen alguna dificultad para desplazarse o van empujando un cochecito de bebé. De ahí que el hecho de que un vecino de la Sexta Sección haya colocado unas rejas expansibles, que toman casi la totalidad del paso peatonal cuando el vehículo está guardado, generara indignación en muchas personas.
La situación se conoció cuando alguien publicó fotos de la reja con el auto en su interior, ocupando la vereda, en el grupo de Facebook "Mendocinos en alerta".
Las reacciones no se hicieron esperar y la mayoría manifestó su enojo por el avance sobre el espacio público. Sin embargo, los vecinos del particular en cuestión manifestaron que si bien no es lo correcto, la inseguridad que viven en la zona es acuciante.
La vivienda se encuentra en calle Chaco de la Sexta Sección. Como carece de garaje y el espacio contiguo a la entrada no es lo suficientemente profundo, una parte del auto queda sobre la vereda.
Y para protegerlo -Los Andes fue a la zona pero no había nadie en la casa en ese momento- han instalado una reja que, plegada, se mantiene sobre la línea permitida. Pero cuando el rodado está estacionado, se expande sobre el paso peatonal.
El director de Obras Privadas de la Municipalidad de Capital, Antonio Curi, explicó que el vecino no solicitó autorización y, aunque lo hubiera hecho, no se la hubieran dado. Asimismo, manifestó que el año pasado lo emplazaron para retirar la reja pero existe un conflicto de titularidad, por lo que el expediente está en Asesoría Legal del municipio. Pese a eso lo han multado en reiteradas ocasiones.
El procedimiento habitual en estos casos, que reconoció no son comunes, consiste en el emplazamiento, la multa y la multiplicación del monto hasta llegar a retirar el elemento o la construcción que no se ajusta al Código de Edificación. Pero esto sólo ocurre cuando se trata de cuestiones de seguridad pública.
Una vecina de calle Chaco explicó que la mayoría de las casas de esa cuadra no tienen garaje, según se comenta, porque se les dio más terreno a las de las esquinas. De ahí que ella deje su auto en una cochera, aunque reconoció que en la zona no abundan. La mujer manifestó que los dueños del enrejado sacan el vehículo muy temprano en la mañana y lo vuelven a dejar en la noche, por lo que durante el día se puede circular por la vereda sin problemas.
Otro vecino planteó que la zona está muy insegura y que, desde hace un año, los frentistas comenzaron a colocar rejas. De hecho, a metros de allí hay un flamante complejo de departamentos que no sólo tiene cierre sino un cerco eléctrico. El hombre sostuvo que entiende que quieran proteger su auto.
Un habitante más de la zona opinó que tal vez les moleste a quienes viven en la misma cuadra y tienen que caminar por la vereda. Pero el hecho le pareció irrelevante en comparación con la inseguridad del entorno. Así, indicó que hace unas semanas delincuentes dispararon al piso para arrebatar el bolso a una mujer y los robos son reiterados.