En un hecho sin precedentes, se llevó a cabo el primer contrato de alquiler en Argentina que utiliza Bitcoin como método de pago, marcando un hito en la evolución de las transacciones inmobiliarias en el país. A pesar de que anteriormente se habían registrado ventas de propiedades en criptomonedas, es la primera vez que se implementa esta forma de pago en un contrato de arrendamiento.
Este acontecimiento se produjo en el marco de las transformaciones en el mercado de alquileres, impulsadas por la entrada en vigencia del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU), firmado por el presidente Javier Milei. El DNU establece la derogación de la Ley de Alquileres, lo que generó nuevas dinámicas en cuanto a métodos de pago, plazos de locación y la actualización de los montos.
En la ciudad de Rosario, un departamento fue alquilado mediante un contrato que establece pagos mensuales equivalentes a US$100. La novedad es que el inquilino realizará las transferencias en Bitcoin, Tether Tokens u otras criptomonedas que mantengan una paridad 1 a 1 con el dólar.
La operación estará bajo la administración de Fiwind, la plataforma nacional de criptomonedas, que permitirá que los pagos sean realizados en cualquier momento y se acrediten de forma inmediata.
La noticia se sitúa en un contexto donde el mercado de alquileres experimenta cambios significativos debido a la flexibilización de las regulaciones. Con la oficialización del decreto, los contratos de locación vuelven a regirse por el Código Civil y Comercial, otorgando libertad absoluta a las partes en aspectos fundamentales.
Por ejemplo, el inquilino y propietario podrán ponerse de acuerdo sobre cada cuánto tiempo actualizar el contrato; el plazo del contrato será el que las partes hayan establecido; ya no se deben inscribir los contratos en la AFIP; entre otras.
La canciller Diana Mondino, en diciembre del año pasado, ya había ratificado la posibilidad de pactar contratos con Bitcoin y otras criptomonedas, así como con bienes tangibles como kilos de novillo o litros de leche.