Al estilo de la exención de la tasa interna que la Nación concedió a los vinos espumantes y como se propone en la Ley Impositiva 2015 para las petroleras, también hoteles y restaurantes quieren gozar de una reducción de la alícuota de Ingresos Brutos del 4% al 2% a cambio de inversiones por el diferencial equivalente.
La iniciativa, que impulsa Aehga (Asociación de Empresarios Hoteleros y Gastronómicos y Afines) y ya está en la Legislatura, tomó curso en especial a partir de la decisión del Gobierno de subir un 25% el mínimo a pagar por habitación cuando la facturación no sustente la alícuota del impuesto.
Hasta hace un par de años, el sector hotelero-gastronómico tributaba en concepto de Ingresos Brutos el 1,5%, tasa que la gestión Pérez multiplicó casi por 3.
Como lo fundamenta Marcelo Rosental, secretario de Aehga, “cumpliendo ciertas condiciones, en especial estar al día con los tributos provinciales, se podía reducir un punto pero pocos lo lograron. Ahora, además, afrontamos la obligación ante Afip de justificar por qué la facturación no alcanza el piso impuesto si ocurre”.
El planteo en busca de atenuar la presión impositiva en la Provincia se aferra al compromiso del sector de “devolver” la reducción que se logre en inversiones en infraestructura hotelera y servicios.
Pero también se apoya en el incremento de costos que significa la suba de la tarifa mínima a pagar obligatoriamente por habitación, al cabo de un 2014 con un nivel de ocupación osciló entre el 50 y 60%, según las cámaras.
Por caso, para un hotel tres estrellas cuya facturación no alcanza el mínimo para el gravamen del 4%, la nueva Ley Impositiva 2015 prevé que la tarifa en temporada alta trepe de $ 125 a $ 155, mientras que en baja pase de $ 110 a $ 135.
Suficiente, a criterio de los empresarios, para insistir con recorte. “Ahora volvemos a la carga con el pedido en la Legislatura, porque en este momento lograr que el Gobierno dé esas ventajas impositivas es difícil.
De por sí, que la nueva ley modifique el mínimo por habitación nos afecta bastante, es mucho dinero para el sector”, explica Alejandro Cherbosky, presidente de la Cámara de Hotelería de Mendoza.
Sin haber sido incluido en el tratamiento de la ley impositiva 2015, el proyecto, que está en la Comisión de Turismo de Diputados, deberá esperar hasta que comience el nuevo ciclo de sesiones ordinarias de la Legislatura.
El esquema propuesto se asemeja al que se aplicaría para el petróleo. En este caso, la Provincia, por imperio de la ley de Hidrocarburos, impulsaba una rebaja del 5% al 3%, aunque en la Cámara baja la UCR lograron imponer un piso del 3,5%.
Por su parte, el ministro de Turismo, Javier Espina, considera “posible” el beneficio por ley para hoteles y restaurantes, aunque sujetó a ciertos ajustes. A criterio de Espina “lo difícil es encontrar el mecanismo de control del destino de los fondos a invertir. Pero es posible”.
¿Cuánto facturan?
Por ahora, no hay números de la facturación del último año, pero según la afluencia esperada para 2015, superaría los $ 200 millones. Asimismo, los empresarios confirman una actualización de las listas de precios de hasta 15%, en los primeros meses de 2015.
Con la mira en la temporada 2015, Turismo maneja una proyección de arribos de $ 3,2 millones de turistas. El monto estimado del aporte se desprende un cálculo estimativo, que toma un gasto promedio de $ 630 diarios por turista en 2014, y una estadía media de 5 días en la provincia. Del total gastado, 30% representa alojamiento y un porcentaje similar comidas.