El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, opinó que "sería injusto" que Lionel Messi terminara su carrera sin haber podido ganar un Mundial de fútbol.
"Sería injusto. Bueno, se ganan Mundiales si se los merece. Hay que ver quién lo merece más en 2018, en 2022. Es así, tenemos muchísimos grandes jugadores que no ganaron el Mundial (y) tenemos muchos jugadores no tan grandes que sí ganaron el Mundial. Eso es la belleza del fútbol", dijo Infantino en una entrevista que publicó hoy el diario La Nación.
Infantino estuvo en Buenos Aires el 4 de octubre pasado durante diez horas. Lo hizo un día antes del empate sin goles entre Argentina y Perú, un resultado que dejó al equipo albiceleste en el sexto lugar de las eliminatorias sudamericanas, en serio riesgo de no clasificarse al Mundial de Rusia 2018.
Argentina tendrá mañana la última posibilidad de conseguir el pasaje mundialista cuando visite a Ecuador, al que deberá vencer para no perder la esperanza de que Messi, que tiene 30 años, juegue el certamen en Rusia.
Infantino expresó que "Messi es uno de los actores principales y absolutos del fútbol de hoy. Alguien que hace enamorar, que juega de una manera absolutamente increíble".
Al respecto, dejó abierta la posibilidad de que Messi, con 35 años, juegue el Mundial de Qatar 2022. "Cuando lo vemos jugar parece que nadie lo puede tocar. Nunca se rompe, nunca se enferma. Y es tan rápido que, aunque quieran pegarle, no pueden", comentó.
Para Infantino, Messi es un futbolista "extraordinario" que, al igual que su compatriota Diego Maradona, marcó una época. "Los 80 y los 90 fueron de Maradona, estos últimos diez años, de Messi. Por supuesto, Maradona ganó también un Mundial (en México 86), sí. Messi todavía tiene que ganar un Mundial", indicó.
Infantino, en tanto, mencionó que "la historia" puede ser un buen argumento para otorgarle a Uruguay, Argentina y Paraguay la organización del Mundial de 2030, como aspiran las tres naciones.
Uruguay fue en 1930 el primer país en organizar una Copa del Mundo y, con aquel antecedente, más la sociedad de argentinos y paraguayos, espera repetir la historia un siglo después.
"Es un argumento importante cuando se sabe de historia y la tradición del fútbol. Pero, por supuesto, no es un argumento que te haga ganar o perder la sede del torneo. El Mundial, y sobre todo el de 2030, es un evento, más que una competición. Es el evento social más importante del mundo", respondió Infantino.