Independiente, máximo campeón histórico de la Copa Libertadores con siete coronas, clasificó este jueves a los octavos de final del torneo continental, al ganarle por 2-0 al venezolano Deportivo Lara, por la sexta y última fecha del Grupo 7.
Martín Benítez (38 minutos) y Emanuel Gigliotti (80) convirtieron los goles para el triunfo del 'Rojo', mientras que Deportivo Lara terminó el partido con diez jugadores por la expulsión de Daniel Carrillo (60)
Con el triunfo, Independiente llegó a 10 puntos y clasificó como escolta del brasileño Corinthians, que pese perder 1-o con Millonarios terminó al tope con mejor diferencia de gol, por lo que ambos acceden a octavos de final. Mientras, los colombianos 'Millos' (8) pasan a Copa Sudamericana y Deportivo Lara (6) se despide del certamen.
Para Independiente, se trató de su regreso a instancias decisivas de la Libertadores después de 23 años, ya que no alcanzaba los octavos de final desde 1995.
Desde el arranque, el conjunto local entró decidido a buscar el triunfo que le diera la victoria para no depender de otros resultados, y pronto arrinconó sobre su campo al Deportivo Lara, que buscó defenderse con casi todos sus hombres en el área.
El ecuatoriano Fernando Gaibor tuvo la primera gran ocasión con un bombazo que tapó Carlos Salazar con lo justo, y de inmediato Benítez impactó un remate al travesaño, todo dentro de un claro dominio del local.
Dueño del mediocampo y con control de la pelota, el 'Rojo' gestionó varias ocasiones para acercarse, pero recién consiguió quebrar la resistencia de los venezolanos en un gol olímpico de Benítez, en un centro que se cerró sobre el primer palo y que Salazar no alcanzó a despejar.
No cambió en absoluto el desarrollo en la segunda parte, con un Independiente lanzado en busca del segundo tanto que le diera la tranquilidad definitiva, a la vez que Lara se replegaba aún más tras la expulsión de Carrillo por doble amonestación.
Aunque dominaba a voluntad, el equipo de Avellaneda no terminaba de sentenciar un duelo desigual y se perdía goles a montones, incluido otro pelotazo de Benítez, que reventó el larguero con Salazar ya vencido.
Finalmente y por decantación llegó el 2-0 definitivo, luego de una buena combinación entre Gaibor y Benítez, asistente del artillero Gigliotti, que casi le rompe el arco a Salazar con un remate a pura potencia.
Aunque debió penar un poco por la falta de puntería, Independiente consiguió el triunfo que necesitaba para sellar su pase a octavos y meterse nuevamente entre los protagonistas de la Copa Libertadores, el torneo que marcó a fuego su historia.
