Fuertes incidentes entre agentes de la policía y manifestantes se registraron este jueves en uno de los accesos a Buenos Aires, en el marco del paro convocado de la CGT contra el gobierno de Mauricio Macri, que prometió desalojar bloqueos en la vía pública.
Una nube de gases lacrimógenos cubría a cientos de manifestantes en la ruta Panamericana, una de las entradas principales a la Ciudad, donde desde la madrugada se registraba una protesta pacífica pero bloqueando la autopista, algo que el gobierno advirtió que no permitiría.
"Si no quieren irse por las buenas, vamos a iniciar el protocolo de acción; el objetivo es que haya caminos alternativos", advirtió ante los medios la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, poco antes de que los agentes de Gendarmería reprimieran la protesta.
Testimonios de manifestantes y periodistas en el lugar denunciaron golpes a "palazos" por parte de los gendarmes que iniciaron el desalojo de la ruta.
Durante los momentos de tensión volaron piedras mientras decenas de vehículos particulares quedaron presos en medio del operativo policial contra los manifestantes.
"Nuestro objetivo es que la gente que quiere ir a trabajar, pueda llegar" a sus sitios de trabajo, señaló Bullrich.
La paralización coincide con la celebración en Buenos Aires del primer Foro Económico Mundial dedicado a América Latina (WEF Latam), que congregará a políticos, banqueros y empresarios en el exclusivo barrio de Puerto Madero, bajo estrechas medidas de seguridad.