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hace 3 horas
El sindicado jefe de la barra brava de Tigre y uno de sus lugartenientes quedaron imputados en la causa por el enfrentamiento a balazos entre dos facciones de la hinchada, que ayer derivó en ocho heridos de bala, y el fiscal del caso investiga por qué no había presencia policial en la zona.
Fuentes judiciales informaron hoy que los dos imputados son Daniel Paz, alias "el Negro Fiorucci", presunto líder de la hinchada, y otro de sus referentes, llamado Abel Lavigna, alias "El Gallego", quien es uno de los ocho heridos de bala.
En base a la declaración de testigos, el fiscal de San Fernando a cargo de la causa, Alejandro Musso, les imputó los delitos de "abuso de arma y lesiones graves".
Además, el fiscal Musso investiga por qué no había presencia policial al momento del enfrentamiento a balazos entre los dos grupos, que fue alrededor de las 16.30 en las inmediaciones del estadio ubicado en la localidad de Victoria, partido de San Fernando.
Las fuentes explicaron que si bien el operativo de custodia que debía hacer la Jefatura Distrital San Fernando y la Departamental Conurbano Norte, estaba previsto para las 17, el fiscal cree que la policía debía estar vigilando las adyacencias del estadio del club Tigre desde antes.
Musso pidió las imágenes de las cámaras de seguridad ubicadas en la zona, pero desde el municipio de San Fernando le comunicaron que el domo ubicado en la esquina de las calles Perón y Guido Spano, que debería haber filmado toda la secuencia de los enfrentamientos, no grabó nada porque no funcionaba desde el día anterior tras una tormenta.
El fiscal quiere saber cuál fue el origen de la disputa y cómo se desarrolló la pelea que terminó a tiros entre la facción "La 13" y "Los de Pacheco".
Según pudieron determinar los investigadores, todo ocurrió en la tarde de ayer cuando la barra brava de Tigre comenzó a concentrarse en el estadio José Dellagiovanna, con intenciones de dirigirse en caravana hacia la cancha de River.
Los pesquisas explicaron que la barra está liderada por Paz, alias "el Negro Fiorucci", y que la disputa interna comenzó pocos semanas atrás por el reparto de entradas y los viajes a los partidos de la Copa Libertadores.
Un jefe policial contó hoy que el primer enfrentamiento se registró en Pasteur y Perón, a una cuadra del estadio, cuando miembros de la facción de "Los de Pacheco" se mostraron molestos y reclamaron más entradas para asistir al estadio Monumental para presenciar el partido con River.
Allí, aparentemente se escucharon los primeros tiros y varios hinchas recibieron heridas de bala.
Luego, la facción que responde a Paz y que se juntaba en el bar que el ahora imputado tiene a metros del estadio, respondió al ataque y el tiroteo y las peleas se extendieron a Ambrosini y Perón, donde al menos otras dos personas quedaron heridas.
La policía fue advertida de los incidentes por vecinos que circunstancialmente caminaban por la zona, por lo que varios patrulleros de la comisaría local, ubicada a solo siete cuadras de la cancha, se dirigieron al lugar.
Al llegar, los integrantes de la hinchada huyeron y la policía demoró a algunos sospechosos, pero no logró secuestrar armas.
Los testigos explicaron que en el enfrentamiento se escucharon más de 100 disparos, aunque un jefe policial y un vocero judicial dijeron que en realidad los balazos fueron alrededor de 15.
"Los testigos dice que de un lado había cuatro armas y del otro, otras cinco", afirmó una fuente judicial.
Un vocero de la investigación reveló que "el Negro Fiorucci no estaba armado, pero sí dando órdenes, y quienes sí disparaban eran sus laderos".
Las fuentes explicaron que en total hubo ocho heridos de bala trasladados a los hospitales de Tigre y San Fernando, tres de los cuales se encuentran internados en grave estado: uno con un tiro en la cabeza, otro con un disparo en la femoral y el tercero con un impacto en el hemitórax derecho.
Otro de los referentes de la hinchada baleado en una pierna fue identificado por las fuentes como Marcelo Pauliti, sindicado líder de la facción conocida como "La 13", según precisaron los voceros.
Tras tomar los primeros testimonios, el fiscal Musso allanó ayer mismo el bar que pertenece al líder de la barra y el domicilio del otro imputado, El Gallego", donde se secuestraron elementos de interés para la causa, entre ellos, fotografías que muestra a los integrantes de la barra en diversos viajes, incluso, en el último mundial de Sudáfrica 2010.(Télam).-
