El policía que anoche discutió en su casa de Godoy Cruz con su mujer y terminó matándola -según él por accidente- quedó este mediodía imputado de femicidio, una figura legal aprobada por el Congreso en noviembre pasado y que prevé una pena de cadena perpetua.
El hecho en un principio fue caratulado como “averiguación muerte”, ya que el uniformado aseguro que el arma se había disparado sola.
El fiscal especial a cargo del caso, Daniel Carniello, imputó al hombre por homicidio agravado, que con la reforma del código penal, termina siendo imputado por femicidio, que es una figura penal autónoma.
El caso
En una casa de calle Almafuerte al 700, de Godoy Cruz, estaba la oficial Alejandra Verónica Yudica, que trabajaba en la Dirección de Inteligencia Criminal, junto a su pareja, el auxiliar Sebastián Miguel Montivero (32), que presta servicio en la UMAR (Unidad Motorizada de Acción Rápida).
El relato de Montivero es que la mujer estaba acostada en la cama y estaban discutiendo. En un momento dado, él decide abandonar el cuarto y saca de un ropero su arma reglamentaria, una pistola 9 milímetros. El auxiliar asegura que el arma se le cayó y se disparó.
Tras el “incidente”, hubo un llamado al 911 y cuando llegó la ambulancia, encuentran a Yudica tendida en la cama con un disparo en la cabeza, con perdida de masa encefálica, y otro en la muñeca. De inmediato fue trasladada al hospital Central, pero nada pudieron hacer para salvarle la vida.
Montivero fue aprehendido y quedó a disposición de la Oficina Fiscal N° 3, de Godoy Cruz.